Inesperada visita

Sorpresa causó, hasta a las mismas autoridades,  la llegada del presidente del Congreso, Víctor Isla Rojas, a la ciudad de Contamana, quien sin previo aviso enrumbó a la capital de la provincia de Ucayali.

Isla fue recibido en el descuidado aeródromo que el Gobierno Regional se comprometió arreglar, pero que hasta ahora no lo hace,  por tres autoridades que fueron avisadas de su visita minutos antes de su arribo. Les dijo que su intención era comprobar el avance de las obras financiadas por el Gobierno Central. Así entonces, fueron a la carretera que conduce a Aguas Calientes y que está en la etapa de afirmado con ripio hasta el kilómetro 9.

También visitó lo que será el Centro de Salud, comprobando un avance de la obra en un 80%, mostrando su aprobación a la forma en que se está haciendo esta construcción.

Pero fue muy claro al expresar a los responsables de la construcción de la carretera a Aguas Calientes, que esto no va a quedar como la obra del agua y desagüe de Contamana, es decir, inconclusa.

Pero la población no fue ajena a la visita de Víctor Isla, porque una vez avisada, fue hasta el malogrado aeródromo  para decirle que estaba descontenta con la obra de la construcción del colegio Padre Valentín Uriarte, la abandonada obra del saneamiento del agua y desagüe de la ciudad y por supuesto la falta de interés que tiene el Gobierno Regional en arreglar el aeródromo. Isla sólo atinaba a mover la cabeza, manifestando una desazón total.

A punto de abordar el helicóptero para volver a Pucallpa, se dirigió a las autoridades y al pueblo reunido y les dijo que hagan su trabajo en unidad de criterios coordinando acciones para bien de la colectividad y que no dejen de hacer los enlaces respectivos con su Despacho, que está interesado en colaborar codo con codo, en todo lo que signifique desarrollo para este pueblo.

Que este tipo de visitas se extienda a todo Loreto y que se compruebe cómo se están haciendo las obras encargadas por el gobierno central,  que se invierta bien el dinero y que no vaya a parar a los bolsillos de quienes viven del dinero público.