Emoción y alegría con lágrimas contenidas por el enorme esfuerzo desplegado y las tensiones propias de un proceso largo que se coronó ayer con la entrega de la Resolución de Licenciamiento Institucional otorgada a la Universidad Nacional de la Amazonía Peruana/UNAP
Lo vivido ayer en la ceremonia protocolar por este hecho académico histórico para la primera casa de estudios superiores de nivel universitario de la Amazonía, es indescriptible, una mezcla de muchos recuerdos, de desvelos, de alegrías, de temores, sí, y del sueño de lograr la licenciatura reglamentaria para seguir operando.
El “manchari” (temor) ya pasó y la SUNEDU del Ministerio de Educación le ha dado la luz verde necesaria a nuestra querida y añorada UNAP que ha sacado para la sociedad local, regional, nacional e incluso el mundo, miles de profesionales de distintas carreras que la prestigian.
Se pensó lo peor frente a las exigencias dadas para lograr esta especie de autorización para seguir funcionando. Fue todo un reto que hoy lo celebran todos los ex alumnos, alumnos, docentes, administrativos, directivos y la comunidad loretana en general. Así como el apoyo de las autoridades.
Se ha cumplido con las Condiciones Básicas de Calidad (CBC), exigidas por la Superintendencia Nacional de Educación Superior Universitaria (SUNEDU). Pasos que se sellaron con éxito ayer cuando el superintendente de la SUNEDU, doctor Carlos Martín Benavides Abanto, entregara de manera oficial la Resolución y Diploma de Licenciamiento Institucional al rector de la UNAP, doctor Heiter Valderrama Freyre, junto a los vicerrectores y decanos.
El aula magna de la UNAP además que se vistió de gala, se encapsuló con vibras de satisfacción, de orgullo, esperanza y una energía común para seguir soñando pasar de lo básico de calidad, a la ruta que nos lleve a la excelencia todavía soñada y que implica planificarlo desde las presentes para las futuras generaciones.
Junto a los académicos en la ceremonia estuvieron las autoridades políticas, civiles, eclesiásticas y militares de la ciudad. Mientras que previo al acto protocolar los estudiantes de la UNAP de las distintas facultades con el pecho cargado de emoción realizaron una caravana de recepción a los funcionarios de la SUNEDU.
Quizás muchos no entiendan esta algarabía y piensen que el paso por las aulas universitarias no se refleja en diversos aspectos de la sociedad, y tienen razón en parte, porque otros obstáculos ajenos a lo académico como la corrupción, ha afectado el desarrollo planificado con resultados positivos. Así, este acontecimiento en la UNAP nos reta a que la básica calidad se afiance y la SUNEDU siga atenta porque podemos lograr mucho más.
UNAP licenciada
