– La visión de futuro de los jóvenes puesto en el CNI
El CNI en la encrucijada, perfil psicológico de los que quieren hacer fútbol… y los que no quieren hacerlo también
Por: Gerges Bocanegra Picón (marbosan@hotmail.com)
Lope de Vega acuñó en su novela “El perro del hortelano” la frase NO COME NI DEJA COMER para referirse a aquella persona que no queriéndote, humillándote y hasta despreciándote, tampoco te deja rehacer tu vida con otra persona.
Cuando el CNI estaba hundido entre el fango y el lodo sin que nadie le saque de ese “óstraco” (de ostra: estar hasta la …), Iván Vásquez Valera asumía la presidencia de este emblemático equipo de futbol por lo que algunos dijeron “alao” (huy qué dolor, qué peso cargar), ídem aquel varón que se compromete con una mujer que tiene 11 hijos a los cuales hay que mantener, darles ropa, medicina, ver que estudien, cuidarlos que cuando juegan no se lastimen, incluso sus caprichos tan variados de cada uno.
Cuando el CNI pasó a la Copa Perú se empezó a sentir la hinchada (aficionado fervoroso), la del pueblo, de los que apoyan un equipo por sentimiento y cuando disputaba la final para definir su ingreso a la profesional, como dice aquella canción aún era un bulto muy pesado y no había muchos que se animaran a cargarlo. Continuaban las falencias económicas del CNI, continuaban los aprietos y nadie se manifestaba hasta que acorde a la ley decidieron convertirla mejor en Sociedad Anónima para ser manejada empresarialmente, ya que el aporte de los socios no daba para solventar uniformes, entrenadores, pasajes, hospedajes y todos los etcéteras.
En una ocasión cuando era presidente del CNI don Andrés Ferreira, llamaba a amigos, socios, hombres probos que querían al equipo albo y organizaba parrilladas, prestaba dinero y hasta fiaba para ayudarse a solventar los pasajes, comida, hospedajes, medicinas, uniformes, chimpunes y todos los caprichos de los jugadores que se ponen de manifiesto en estas circunstancias, el CNI debía entrar en los tiempos modernos como los equipos que hay en el mundo.
SOSTENER UN EQUIPO DE FÚTBOL
En su anecdotario de la historia del deporte loretano, Fernando Montalván Tuesta recuerda que cuando el Sport Loreto era la gloria del futbol en Iquitos, hubo un dirigente, Máximo Vacalla, “…arrastrado por su deseo de cooperación aceptó … ayudar al tesorero en la cobranza; sin embargo, alguien difundió la especie que Vacalla estaba no sólo usurpando las funciones de tesorero, sino también malversando los fondos, por el hecho de pagar las cuentas del club …” por este motivo fue investigado y, basado en un informe mediocre, algunos buscaron sancionarlo y expulsarlo; sin embargo, “…en el curso del debate se aclaró, con la rendición de cuentas, presentada allí mismo por Vacalla … demostró que de su propia plata había pagado por arreglos de la cancha, y comprado una pelota de fútbol que aún no había cobrado al club.”
Hacia el 2005, el mismo club, el Sport Loreto, había caído a segunda división y luchaba por ascender, aquel año asumía la presidencia del pentacampeón Felizardo Campos, quien adelantado a los tiempos y proyectando una visión de desarrollo del fútbol loretano, quiso convertirlo en sociedad anónima para que peleando en primera división se llegue a la Copa Perú; sin embargo, los demás dirigentes se resistían a convertirlo en sociedad anónima, es decir, en empresa como lo es hoy el CNI. El sport Loreto, el añejo sport Loreto que se resiste a desaparecer salvó la baja este año porque, como todos saben, en la liga y en los clubes armó su escuadra a tres días de empezar la temporada, no hacía cambios en los partidos porque faltaban chimpunes, los muchachos no tenían físico porque no había ni para alquilar una cancha, apenas les invitaban un caldo de gallina antes de los partidos. El entrenador y el preparador físico renunciaron por falta de pago. ¿Todo eso cuesta sostener un equipo? Quien no viste una camiseta o no es hincha no lo entiende, porque el hincha quiere sacar de su bolsillo para apoyar aunque sea con agua y cuando no lo tiene siente una frustración. Entonces sólo te queda ir al estadio y gritar y sufrir cuando vas perdiendo y cuando el árbitro no te cobra un penal lo insultas desde su abuelita hasta su quinta generación.
PARA SER GRANDE EN EL FÚTBOL
En Perú son tres los catalogados grandes: Alianza Lima (fundado en 1901), Universitario de Deportes (fundado en 1924) y Sporting Cristal (fundado en 1955) y tienen sus clásicos que convoca multitudes y permite consolidar el fúutbol, los clubes y la esperanza de jóvenes de ingresar alguna vez a estos grandes.
Estos equipos son tan antiguos como el CNI (fundado en 1926) y, al igual que ellos, fueron los ingleses los que motivaron su creación, ya que nosotros teníamos contacto más directo por el comercio del caucho con la Gran Bretaña. ¿Por qué no estar entonces entre los grandes? Si nosotros tenemos fútbol al igual que lima desde los albores de 1912 que se dan los primeros encuentros que organizaba la Liga Peruana de Fútbol de entonces. Hoy por hoy, la Federación Internacional de Historia y Estadística de Fútbol ubica a Perú en el 16º lugar como la mejor liga del mundo y en el 5ºlugar como la más fuerte de sud América. Iquitos fue uno de los dos estadios más taquilleros de la temporada 2010, somos uno de los dos estadios que no tiene malla y señala el mejor comportamiento o cultura deportiva de su gente a nivel nacional. Claro nos falta otros factores, como:
– Ganar títulos nacionales y cuantos mejor internacionales.
– Tener socios o simpatizantes, ojalá como la popularidad del “Barza”.
– Figuras o estrellas, ídolos que los niños y jóvenes vean como ejemplos.
– Que nuestros jugadores sean convocados a la selección u otros equipos.
– Infraestructura, su propio estadio y otras comodidades para los hinchas.
Según las estadísticas de la Copa Libertadores el Cristal viene participando 28 veces en este torneo, Universitario 27 y Alianza 21; sin embargo, hay otros como la UTC de Cajamarca, San Agustín de Arequipa, Bolognesi de Tacna, el Torino de Tarma que es una provincia, el Chalaco del Callao y el Municipal de Lima que apenas han besado una vez estos eventos. Recientemente, decía Hertz Hemerith que el Perú manda futbolistas a las ligas europeas, cholos de acero inoxidable y nos devuelven para la selección jugadores de vidrio porque en pleno entrenamiento se “lesionan”. Cuando aquí en la selva peruana, el cholo Yahuarcani, el Inhuma, ese que sólo come su timbuche o su patarashca con su masato, juegan en cancha “bola bola”, con un pedazo de grass aquí y una cocha allá y como no tienen para chimpunes un par se reparten entre dos, el zurdo agarra su lado y el que es derecho lo que le corresponde, increíble y hasta sin zapatillas. Y cuando les meten una carretilla caen como si fueran zapallos y los jijunas siguen corriendo porque el gol está cerca y sólo reciben de pago el gooooooool de la hinchada.
Qué necesitamos para tener fútbol grande en Iquitos? Eso lo tengo claro, por lo menos, no ser perro del hortelano.
