No se sabe qué destino tuvo el presupuesto asignado a los Juegos Deportivos Escolares, para que hoy, los jóvenes escolares ticunas estén pasando necesidades, como que han estado viviendo en un hacinamiento en el local de la Casa del Maestro sin una regular alimentación.
Eso ha motivado, que el jefe del IPD-Loreto, Mario Ríos Espinoza, decida que esta delegación escolar fuera albergada en las instalaciones del Estadio Max Augustin, donde tienen un mejor ambiente para descansar.
Durante su permanencia en el primer escenario deportivo de la región, los escolares que año a año vienen a competir para pasar a la etapa nacional, están en la incertidumbre de qué institución les proporcionará alimentación, porque para esto, el IPD no cuenta con presupuesto, por lo que su único compromiso es ofrecer alojamiento.
Realmente, es preocupante que el gobierno regional haya descuidado las atenciones que es su obligación dar a una delegación de muchachos que practican deporte, que necesitan estar bien alimentados para poder ofrecer toda su capacidad competitiva y alcanzar una representación que los lleve a codearse con otras delegaciones a nivel nacional.
Nunca, hasta llegada esta oportunidad, los Juegos Deportivos Escolares estuvieron tan descuidados como para esta vez la delegación de escolares ticunas, esté pasando necesidades y tratando de salir de una difícil situación, en vez de estar dedicada a la práctica y el entrenamiento de sus deportes.
Este maltrato debe superarse en el día y que el gobierno regional rectifique su error y que atienda como debe ser a esta joven delegación que no ha venido a mendigar un plato de comida, sino a demostrar su potencial deportivo con la ilusión de representar a nuestra región en una justa nacional.
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