La historia de la conservación en Loreto ha tenido varios hitos importantes en los últimos veinte años, entre los que resaltan el establecimiento de las primeras áreas de conservación regional a partir de 2009 -año en que se estableció el ACR Comunal Tamshiyacu Tahuayo. Estas áreas tienen como principios para su administración la co-gestión, la conservación con enfoque productivo, el manejo adaptativo y el enfoque ecosistémico. Lo cual ha permitido que las comunidades puedan apropiarse y ser aliadas estratégicas de la conservación en estos espacios, y en consecuencia el paradigma de la conservación ahora es “por la gente, para la gente”, es decir, que las comunidades reconocen la importancia de la conservación para el mantenimiento de su calidad de vida.
Asimismo, resalta el incremento de mecanismos de conservación tales como las Áreas de Conservación Privadas (ACP), las Áreas de Conservación Ambiental (ACA), las Concesiones de Conservación y Ecoturismo, entre otros. Frente a esto surge la necesidad de contar con una plataforma que permita la articulación entre todos estos mecanismos: el Sistema Regional de Conservación de la Diversidad Biológica de Loreto (SRC).
Este sistema, reconocido mediante Ordenanza Regional en 2018, se define como un “modelo de gestión participativa, consensuada y articulada de la diversidad biológica, con el objetivo de mantener la integridad y funcionabilidad de los ecosistemas y de los servicios ambientales que estos brindan”.
Y está compuesto por tres componentes: 1. Una base física, conformada por todas las modalidades de conservación y los sitios prioritarios para la conservación de la diversidad biológica. 2. Una base legal, que enmarca la normativa para el reconocimiento e implementación de este sistema, así como los documentos de gestión orientadores a su funcionamiento. 3. Una base institucional, que representa el espacio de consenso donde los diferentes actores como organizaciones públicas y privadas, con competencias e intereses en la conservación, planifican, acuerdan y promueven acciones conjuntas.
Actualmente, se viene construyendo una visión en conjunto denominada un “Loreto Verde” con el objetivo de cohesionar el trabajo que vienen realizando todos los miembros del sistema -cada uno desde su “trinchera”- y remar juntos para lograr los objetivos trazados. Bajo esta visión se plantea el trabajo por cuencas, paisajes o mosaicos con la intención de gestionar el territorio de manera integral, y contribuir al crecimiento económico regional y a la mejorar de la calidad de vida de la población loretana a través del aprovechamiento sostenible de sus recursos naturales.
Hay mucho camino por recorrer y el trabajo es arduo. Sin embargo, con paciencia y trabajo en conjunto podemos hacer que lo “imposible sea posible”, por todas y todos aquellos que nos antecedieron en este sueño de un “Loreto Verde”.
El sueño de un Loreto verde: conservar por la gente y para la gente
