Reasfaltado de calles

Se esperaba una decisión inmediata, porque, sinceramente, la ciudad está hecha un asco. Si así la vemos quienes vivimos en ella, qué dirán los visitantes, esa gente que viene de ciudades muy bonitas, donde las personas respetan las señales de tránsito, no arrojan basura en cualquier parte y cuidan sus jardines.

La declaración del presidente del Gobierno Regional de Loreto, sobre el reasfaltado de 171 cuadras de las calles de mayor tránsito, trae un gran alivio a quienes queremos una ciudad donde se pueda vivir sin temor a caer en un buzón sin tapa o a perder la vida por un desnivel en la pista, peligros presentes en todas las vías como las intransitables avenidas Quiñones y Augusto Freire, por poner tan solo dos ejemplos.

La obra estará a cargo de la misma empresa que está realizando el alcantarillado y se iniciará esta semana. Lo que hay que exigir es que el reasfaltado se haga con materiales de primera, que esté en manos de gente profesionalmente calificada en este rubro para que finalmente tengamos un trabajo de calidad.

No estamos por la rapidez inmediata. No queremos una obra de hoy para mañana, sin pensar que de aquí a un año no valdrá porque estará deteriorada, como muchos asfaltados de gestiones municipales que se están desgranando sin haber cumplido siquiera un par de años.

Lo que la ciudadanía espera es una obra de calidad, que sea duradera, lo que debe interesar aún más a la autoridad regional, para que sus detractores no se agarren de una perlita más para desatar una feroz campaña  en su contra.

Preparémonos a un sacrificio más, mantengamos la serenidad por las incomodidades que esta obra va a traer, pero que a la larga, esperamos, será de gran utilidad para todos.