“Los que vamos a egresar tenemos que encargarnos de cambiar esa imagen”

– Estudiante del quinto nivel de Derecho de la Unap, en cuanto a la mala fama de los abogados:
fiscales y alumnos de derecho

La campaña jurídica realizada entre el Ministerio Público y la Unap, permitió conocer a un grupo de estudiantes ansiosos por terminar su carrera, pero a la vez muy conscientes del rol que comenzarán a protagonizar como parte esencial de la sociedad. Esperan ser una generación de abogados probos que limpie la imagen muchas veces manchada por los mismos hombres de leyes.
“A lo que queremos llegar es que la persona que ve vulnerado ciertos derechos de familia tiene acceso a la justicia gratuita, saber que estos procesos están exonerados de tasas judiciales y tienen el apoyo de instituciones como la Defensoría Pública, el Ministerio de la Mujer y Ministerio Público que les pueden apoyar.
Incluso el estudio jurídico de la facultad de Derecho les puede apoyar con asesoría, funciona en las instalaciones de la misma facultad, en la calle Sargento Lores cuarta cuadra. Contamos con un docente a cargo y alumnos que están prestos a ayudar a la sociedad.
Cuando culmine mis estudios quisiera ser una abogada que ejerce el oficio de manera particular y brindar asesoría a gente que los necesita. Varios ya tenemos la oportunidad de practicar en un estudio y tenemos la experiencia de los docentes que siempre están inculcándonos por el camino correcto.
Mucho se habla de los abogados que defienden a los delincuentes pero hay que decir que toda persona tiene derecho a la defensa, es parte de nuestra profesión. Lo que el Derecho percibe no es eximirle de responsabilidad, sino que lo asuma y si está arrepentido le sirva para restablecer su vínculo a favor de la sociedad.
Los abogados tenemos mala fama, pero los que vamos a egresar tenemos que encargarnos de cambiar esa imagen, me atrevería a decir que en mi salón, al menos con los chicos que estamos ya cinco años, van a dar buena imagen a la profesión. Sé que se van a comportar conforme a las normas sociales, los considero moralmente aceptables”, refirió Evelyn Sánchez, estudiante del quinto nivel de la facultad de Derecho y Ciencias Políticas de la Unap. (GL)