Durante la audiencia hubo detalles que no se dieron a conocer anteriormente

  • Uno de ellos, el padre había planeado la muerte de su hijo en agosto del 2022


A las 3:30 de la tarde se dio inicio a la audiencia de prisión preventiva por 18 meses en contra de Jesús Bautista y Vanessa Cachique padres del bebé asesinado en Iquitos.
La audiencia se llevó a cabo en la sala del Cuarto Juzgado de Investigación Preparatoria de Maynas a cargo del magistrado Gary Martin Nolasco Velezmoro.
El Dr. Tito Chávez Fiscal Provincial de la 5ta Fiscalía Provincial Penal Corporativa de Maynas inició su oralización y dio a conocer que dos testigos protegidos declararon en contra del papá, Jesús Bautista.
Indicó también que en agosto del año 2022, Bautista planeó acabar con la vida del niño, no con un arma blanca, sino más bien con un arma de fuego, pero no se llegó a cumplir porque fue destacado a la frontera en su condición de militar.
El papá buscó a un soldado para que mate a su hijo, cuando este tenía 5 meses. Iba a depositar el dinero en dos armadas a la cuenta de un sargento, lo iban a pasar como un préstamo. “Tienes que dar vuelta a mi hijo”, le insistía al testigo protegido.
Durante la oralización el fiscal Indicó que el padre planeó la muerte de su hijo, buscó a más soldados, una moto, pasamontañas y pistola. El objetivo era el niño, disparar al niño. Tenía que parecer como un ajuste de cuenta en contra de la mamá, “paga tu cuenta ctm”. Todo esto era el plan para no pagar la pensión de 1600 soles. Para el ministerio público aquí había un caso de conspiración, sin embargo durante el análisis del juez esto quedó descartado, más bien el delito de sicariato sí fue admitido por el magistrado para los dos padres.
Había más detalles durante la intervención del fiscal. Tito Chávez seguí exponiendo, Tenía que aparecer que es un ajuste de cuenta. “Si la policía te captura dices que es un ajuste de cuenta entre la mamá y su tío. Si no cumples el trabajo, yo sé dónde vive tu mamá, tus hermanitos, tu abuelita, tu familia, te puede pasar algo. El suboficial tenía a su mando a personal de tropa para que haga este chambita”
El testigo se negó a hacer el “trabajo”. El papá le dice: “Yo no quiero dar pensión a mi hijo”, tú tienes que cumplir con esta chamba, luego le agarró del cuello al testigo, siguió amenazándole hasta dejarle sin respiración.
Desde el mes de agosto había la actitud del investigado de amenazar al testigo. El investigado dijo que si no hacía ese trabajo le iba que mandar la frontera. A pesar que el investigado, que también estaba en la frontera, éste amenazaba al testigo para que concrete el trabajo.
“Conseguiste el globo (la pistola), conseguiste bicicleta (la moto), material que iba a hacer utilizado para el asesinato del bebé, era lo que preguntaba el imputado al testigo (soldado)”
Con respecto a la investigada dijo en un primer momento que llevó a su hijo al puente Nanay y en la tercera declaración indicó que el investigado puntualmente no sabía dónde iban a ir.
La mamá durante el momento que se encontraba en el puente dijo que había un asalto. Salió en defensa del esposo y éste cayó al suelo pero nunca fue así. No hubo asalto. La mamá dijo que el sujeto sacó un cuchillo. En su mano derecha había un cuchillo con el cual le incrusta. Los sujetos tras cometer el hecho se fueron en moto por la avenida La Marina y esto no se ajustaba a la verdad.
Mamá: “tras el hecho nos fuimos por el puente”
Papá: “nos quedamos ahí, la moto no podía prender por 20 minutos”
Estás fueron las declaraciones durante la reconstrucción por separado por parte de los padres, lo cual para la fiscalía hubo contradicciones y no coinciden.
No hubo asalto, no hubo sujetos que huyeron hacia Santo Tomás. No había terceros. Tal como dijeron en un primer momento que fueron asaltados, que los delincuentes huyeron hacia el fondo del puente.
La mamá dijo que el padre tenía un fierro con anillos, envuelto en su chompa de color negro, que no prestó mucha atención en este momento.
La mamá no vio a los asaltantes, no vio a los sujetos, no vio el cuchillo, el investigado (el papá) le enseñó lo que iba a decir bajo amenazas
El cuchillo con el que fue muerto el niño tenía 15 cm y el niño fue acuchillado con 12 centímetros de profundidad.
(C. Ampuero)