Qali Warmas regionales

Estamos convencidos que cuanto más cercana a la zona de consumo esté instalada la elaboración de alimentos, habrá una mayor garantía frescura y de salud para los escolares que consumen, en este caso, los productos de QaliWarma.
El Estado lo que debería hacer es promover la producción local y la elaboración de alimentos nutritivos y aceptables para el gusto de los niños, niñas y adolescentes de cada una de las regiones del país, y con un control sanitario estricto, estaremos garantizando el no desperdicio de los productos.
Lo que ha pasado con la retención de 849 cajas, con 46 latas de pollo cada una, al estar presuntamente en mal estado fueron inmovilizadas en Cajamarca por la Primera Fiscalía de Prevención del Delito, es inaceptable.
No tendría por qué ocurrir cuando las autoridades nacionales ponen como pretexto para no consumir productos regionales, justamente porque no se cuenta con las garantías en los procesos de elaboración. Pero, tampoco se muestran muy interesados en que esta situación cambie, no invierten para que esto se revierta.
Es por eso que se sospecha que los mismos mezquinos intereses de las grandes empresas de Lima y otras ciudades costeras siguen haciendo daño al país, no solamente limitando el derecho de los escolares a consumir productos de sus regiones, frescos y nutritivos; sino impidiendo que la inversión del Estado reactive las economías locales y regionales. Puro centralismo negligente y sin visión de estadista que tanto añoramos posean nuestras autoridades nacionales de turno.
Respecto a las conservas retenidas en Cajamarca, fueron llevadas al laboratorio para el examen microbiológico respectivo y se esperan los resultados para determinar si se trata de un delito contra la salud pública. El objetivo de estas intervenciones es salvaguardar la salud de los escolares.
Es importante señalar que se han dado avances en relación al uso de productos regionales en la dieta alimenticia de los escolares, como en el caso de nuestra región Loreto, donde se viene incluyendo paulatinamente, por ejemplo, el pescado, fariña, tapioca, upe, y otros.
Pero esto es insuficiente. El Estado no solamente debe hacer fintas de descentralización, sino de establecer las herramientas necesarias urgentes para que estos pasos sean sostenibles en el tiempo.
En ese sentido, nos falta un desembarcadero pesquero de calidad y un Cite Productivo que pueda cumplir con sus funciones al 100% que nos permita cumplir con la orientación de estándares de calidad de producción, para comercialización dentro y fuera de las regiones.