Como cuando vamos a una venta de comida o a un restaurante y tenemos una variedad de comidas para decidir qué vamos a consumir. Pero, pasa que después de leer la lista tienes que elegir una sola, aunque al leer la lista te enteraste de todo lo que hay.
Eso en cuanto a la variedad para el consumo de comidas, aunque lo podemos poner de forma figurativa a la oferta de noticias que tenemos en los diferentes medios de comunicación tanto locales, regionales, nacionales, internacionales, y por supuesto por las redes sociales.
Claro, que la oferta de noticias es muchísimo más amplia que una lista del menú, pero lo ponemos como una forma de decir que tenemos para escoger, que tenemos la posibilidad de seleccionar lo que queremos y lo que no, y en esa elección se tiene en cuenta lo que nuestro estómago recibe bien, aunque a veces el gusto del paladar se antepone con resultados, fastidiosos.
Es lo mismo que creemos está pasando con nuestra ligera evaluación al momento de elegir qué leer, qué escuchar o qué mirar, o a qué le dedicamos nuestro tiempo para enterarnos de lo que está pasando en nuestro entorno, desde los temas políticos, sociales, de gobierno, recreativos, etc.
Así si elegimos un tema como la decisión del Tribunal Constitucional de aprobar el indulto al ex presidente de la república Alberto Fujimori, por lo que recupera su libertad luego de varios años de internamiento, nos encontramos con variadas opiniones que van de un extremo al otro, aunque también están los mesurados.
Los enfoques noticiosos tienen diversos ingredientes o figurativamente, comentarios, uno que el delito de lesa humanidad no debería aplicar por considerarlo una persona de elevada edad y mal de salud, lo que configuraría en un desbalance y hasta privilegio frente a otros encarcelados en similar condición, y a los cuales no les concede este beneficio.
Otros consideran que sí aplica más tratándose de un ex presidente que combatió al terrorismo, aunque se olvidan del enorme daño por la corrupción ocasionado al país, cuyas enormes pérdidas económicas no han sido recuperadas todavía. Y se podría concluir que los daños de los extremos de izquierda o de derecha, y hasta de los del centro, son detestables. Esperamos que el menú electoral que tendremos este año, sea bien analizado y votemos por capacidades y virtudes, y no por quienes más show ofrezcan.