Cuando las entidades ediles y el mismo gobierno regional contaban con importante suma de dinero por fondos del canon petrolero, los Comités de Vigilancia de los acuerdos del Presupuesto Participativo expresaban sus reclamos porque varias de las obras acordadas no se cumplían.
En la actualidad se vienen llevado a cabo varios procesos y el gran tema es que no cuentan con presupuestos como para aprobar la realización de proyectos de obras que desean priorizar las autoridades comunales que traen los acuerdos tomados en asamblea.
Así, varias autoridades llámese tenientes gobernadores, agentes municipales, apus y hasta los directores de colegios que participan, han expresado su reclamo por las carencias económicas. «Nos regresamos sin nada a nuestras comunidades» se escucha decir, como también la extrañeza de que por qué ya no se exigen mayores recursos para gastos de inversión al gobierno central.
Y una de las autoridades municipales, sino la única que se ha expresado sobre el asunto es la alcaldesa del distrito de Indiana, Janet Reátegui Rivadeneyra. Fue clara y directa: «No es posible que nos manden a un presupuesto participativo cuando nuestro canon petrolero solamente ha llegado a 308 mil soles. No tengo para gastos de inversión».
Refleja una realidad por lo que ninguna otra autoridad se ha pronunciado, y es una postura que gran parte de la ciudadanía no logra comprender, si son quienes nos tienen que representar ante situaciones que afecten nuestros derechos ciudadanos, es más, nuestras expectativas relacionadas al desarrollo directo de los pueblos.
Hubo un atisbo de reclamo a través de la Asociación de Municipalidad de la Región Loreto-AMRELOR, que exigió recursos económicos compensatorios al gobierno central, pero este respondió prometiendo obras desde el gobierno central. Eso no es suficiente. Lo que se necesita es el dinero fresco, el rubro de gastos de inversión. Y seguimos pensando que se hace necesario el surgimiento de liderazgos capaces de convocar a todos los colores (partidos políticos – asociaciones).
Si bien el gobierno central se comprometió a aprobar obras para la región en general, como una especie de compensación, pero ni eso todavía se cumple al 100% y está pasando ya casi dos años y medio. «No tengo para gastos de inversión» ha dicho con cierta decepción la alcaldesa de Indiana. Cuántos colegas suyos se sumarán y así unir sus voces para un reclamo pacífico ante la instancia respectiva.