8 de abril: Homenaje a Jenaro Herrera a 163 años de su nacimiento

El lunes 8 de abril, se cumplen 163 años del natalicio de Jenaro Ernesto Herrera Torres (1861).
Fue el primer Juez de Loreto; impulsor de la Ley N° 230 que crea la Corte Superior de Justicia de Loreto; promotor que se traslade la capital de Loreto a Iquitos (9 de noviembre de 1897); impulsor del Decreto Prefectural del 29 de abril de 1905 que crea el pueblo de Requena; entre otras memorables contribuciones a la Amazonía.
En el marco de esta relevante fecha, la Corte Superior de Justicia de Loreto realizará una ceremonia donde develará en su honor el busto de tan ilustre personaje.
La escultura será instalada en el hall de la sede central de la Corte, al pie de su embellecido jardín y pileta; uno de sus espacios más emblemáticos y de mayor afluencia en esta entidad pública.
Asimismo, contará con la presencia de las principales autoridades y representantes de instituciones, como de organizaciones del ámbito académico y cultural.
Cabe anotar que, este evento se suma a los reconocimientos que, a lo largo de varios años, la Corte de Loreto ha otorgado a notables personalidades cuyos aportes fueron fundamentales para la preservación y desarrollo de la Amazonía loretana; entre ellos, Samuel Fritz, Francisco Requena, Joaquín Capello y más.
A continuación, se presenta el artículo del Dr. Aristóteles Álvarez López, que referencia la vigencia y relevancia del importante legado de don Jenaro E. Herrera; quien debe ser revalorado en la Historia de Loreto y del Perú.

Francisco Requena, Jenaro E. Herrera y Raúl Porras Barrenechea en la Historia de la Amazonía del Perú

  • Por: Aristóteles Álvarez López

A 200 años de su muerte en Madrid (11 de febrero de 1824), en misteriosa coincidencia, recién se conoció el verdadero rostro de Francisco Requena y Herrera, gracias a haberse hecho público su autoretrato, pintado en 1819. Como se sabe, este eminente hombre de la ilustración fue el Primer Gobernador de los extensos territorios que hoy forman parte Amazonía del Perú. Hasta antes de 1802, estas tierras formaron parte del Virreynato de Nueva Granada, cuya capital era la ciudad de Bogotá (actual República de Colombia).
Gracias a su providencial designación en 1779 como Gobernador de Maynas, y Comisario de Límites de la IV Partida para deslindar territorios con el Reino de Portugal (Tratado de 1777), llegó a la localidad de San Joaquín de Omaguas (donde nace el Amazonas – Loreto), el 15 de marzo de 1780. Desde entonces, hasta su retorno a España en 1796, trabajó esforzadamente durante 16 años aproximadamente, recorriendo estas extensas tierras, identificando su geografía, flora, fauna, poblados nativos y mestizos, pintando acuarelas de la vida en la Amazonía de la época, entre otras. Sorteando muchas dificultades y grandes carencias, cumplió parcialmente su cometido.
Si bien no cumplió con la delimitación de fronteras con el entonces imperio portugués en la Amazonía; empero, hizo acopio de un enorme volumen de información crítica sobre la realidad de la Amazonía hispana y los graves riesgos que conllevaba el mantenimiento del statu quo territorial; por lo que sus informes al rey español, al Consejo de Indias (órgano rector de los dominios hispanos en ultramar), como también a las diversas instancias del poder español, concluían recomendando la necesaria segregación de estos territorios que formaban parte del Virreynato de Nueva Granada, para ser incorporadas al Virreynato del Perú.
Estos Informes iban acompañados de cartas geográficas bastantes descriptivas, que por sí solas ilustraban gráficamente la realidad geopolítica de estos territorios y las grandes amenazas que significaban para España la agresiva política portuguesa de “fronteras móviles” que conllevaban la progresiva ocupación de los territorios amazónicos.
Finalmente, la contundencia de sus documentados estudios e Informes, especialmente el último de ellos (abril de 1799), influyeron decisivamente para la dación de la Real Cédula del 15 de julio de 1802, que incorpora cerca de 500, 000 kilómetros cuadrados de territorio al Virreynato del Perú.
Francisco Requena, es la personalidad que más ha contribuido al engrandecimiento territorial del Perú en los últimos 250 años; esto es, después de producidas las grandes desmembraciones territoriales del Virreynato del Perú, con la creación de los Virreynatos de Nueva Granada y Río de la Plata, respectivamente.
Con la Independencia de las nacientes Repúblicas de Hispanoamérica, se puso en cuestión la vigencia de la anotada Real Cédula de 1802. La entonces Gran Colombia, y luego las nacientes Repúblicas de Colombia y Ecuador, respectivamente desconocieron dicha Real Cédula. Por lo contrario, nuestro país defendió la validez jurídica de la misma, proclamando la plena vigencia del principio del Uti Posidetis jurídico en la delimitación de las fronteras territoriales de las nuevas Repúblicas.
Ante la actitud contumaz y agresiva de tales vecinos, los peruanos defendimos -desde 1828- en los campos de batalla y en complejas negociaciones diplomáticas, la peruanidad de los territorios amazónicos; que deben continuar contribuyendo a la mejora de la calidad de vida de los peruanos, especialmente del hombre loretano, como también al engrandecimiento del Perú.
Como puede advertirse, el gran iniciador de esta gesta fue don Francisco Requena y Herrera, en cuyo homenaje publicamos dos importantes trabajos elaborados por Jenaro E. Herrera Torres y Raúl Porras Barrenechea; quienes fueron eminentes escritores del pasado siglo XX.
JENARO E. HERRERA TORRES
Nació el 8 de abril de 1861. Fue un gran patriota que combatió en defensa de Lima, durante la Guerra con Chile. Fue herido gravemente en la batalla de Miraflores. Luego de la desocupación de Lima por las tropas chilenas, retomó sus estudios de abogacía en la Universidad de San Marcos.
En 1893, fue nombrado Primer Juez de Primera Instancia del extenso territorio de Loreto (que entonces comprendía los actuales Departamentos de Loreto, San Martín y Ucayali).
Durante su permanencia en Loreto, trabajó incansablemente en defensa de los territorios amazónicos, frente a las injustificadas pretensiones de las vecinas Repúblicas de Colombia y Ecuador, como se tiene expresado.
Conjuntamente con destacados profesionales, militares, empresarios, trabajadores y otros ciudadanos peruanos, recorrieron los territorios amazónicos identificando pueblos y uniéndolos a través del río, levantando mapas geográficos, demarcando territorios, ríos, lagunas, y demás; afirmando así la peruanidad de éstos.
Jenaro Herrera fue impulsor de que Iquitos sea la capital de Loreto, trasladándola de la entonces ciudad de Moyobamba; lo que se hizo realidad con la ley del 9 de diciembre de 1897. También fue impulsor de denominación del pueblo de Requena, en merecido homenaje a Francisco Requena; lo que se concretó con el Decreto Prefectural del 29 de abril de 1905, expedido por el doctor Hildebrando Fuentes, entonces Prefecto de Loreto, y con quien Herrera compartiera aulas en la Universidad de San Marcos, y participaran en la guerra de resistencia contra el invasor chileno.
Luego de la victoriosa Guerra con Ecuador, en 1941, en que se suscribe el Tratado de Río de Janeiro, del 29 de enero de 1942, que consagra de modo definitivo las fronteras de la Amazonía Peruana, se expide la Ley Nº 9815, del 2 de julio de 1943, que reconfigura el mapa político de Loreto, elevándose a categoría de Provincia la localidad de Requena, con su capital el mismo nombre. El Perú entero reconocía así la providencial obra de Francisco Requena, como también del gran historiador amazónico don Jenaro E. Herrera, cuyo nombre lleva un pueblo de dicha provincia (Requena), que con el tiempo fue elevado a la categoría de distrito. Jenaro Herrera murió en Lima en 1941. Sus restos reposan en el cementerio Presbítero Maestro.
RAÚL PORRAS BARRENECHEA
Nacido en Pisco (Ica) en 1897, es uno de nuestros grandes historiadores y literatos del siglo XX. Sobre su trayectoria y obra de vida se ha escrito de modo abundante, especialmente desde su inesperada muerte en 1960. Siendo joven universitario Sanmarquino participó del gran movimiento de Reforma Universitaria de 1918, formando parte de la pléyade de intelectuales conocida como “La Generación del Centenario”, entre los que destacan Jorge Guillermo Leguía, Jorge Basadre Grohmann, Luis Alberto Sánchez, Víctor Raúl Haya de la Torre, José Carlos Mariátegui y muchos otros peruanos que contribuyeron de manera decisiva a moldear el pensamiento peruano del siglo XX.
A lo escrito a lo largo de estas décadas sobre su trayectoria es muy poco lo que pueda agregarse en esta breve presentación excepto, resaltar el hecho de haber abordado con rigor y precisión de investigador la Historia del Perú del Virreynato, en la que se plasma su respeto y admiración por el legado hispánico, como también por los mitos y relatos pre-hispánicos. Entendió el Perú como producto del mestizaje que llega con la conquista, esto es, con el cruce de culturas milenarias desarrolladas a ambos lados de los océanos Atlántico y Pacífico. Son muchas las obras que escribió al respecto, destacándose entre ellas Fuentes Históricas Peruanas, Mito y Tradición en el Perú y El Sentido Tradicional en la Literatura Peruana.
En su rol de investigador y diplomático al servicio de la República escribió su conocido libro Historia de los Límites del Perú, en la que aborda con serenidad y objetividad grandes acontecimientos que marcaron nuestra historia colonial y republicana para definir el territorio que hoy día nos identifica. También esclareció, con información histórica irrebatible hasta nuestros días, sobre el nombre del Perú, que como lo dejó escrito, el vocablo proviene de América Central y es de origen hispano.
Durante sus investigaciones historiográficas en el Archivo General de Indias (Sevilla), la Biblioteca del Palacio Real (Madrid), entre otros archivos con fuentes primarias, descubrió el Primer Informe, que hizo Francisco Requena en 1785 al Rey de España, en la que aquel describe la realidad geográfica, social, económica y el abandono en que se encontraban estos extensos dominios.
En su Informe da cuenta que la actual ciudad de Tabatinga había sido ocupada por los portugueses en 1775, luego de la expulsión de los Jesuitas del territorio hispano.
La referida descripción de Maynas de 1785, se halla en copia manuscrita en la Biblioteca Real de Madrid y que fuera publicada por primera vez en el Perú por Raúl Porras Barrenechea en el Boletín de la Sociedad Geográfica de Lima, bajo la denominación Una descripción inédita de Maynas. La introducción a este informe de Francisco Requena fue hecha por el propio Porras, que hoy reproducimos.
Esta descripción de Maynas, nos proporciona valiosos datos respecto a los orígenes del nombre de Iquitos pues en ella aparece identificado como “Napeanos”, integrados por pobladores de las etnias de napeanos e iquitos respectivamente.
Del contenido del documento se infiere de modo indubitable que la primera vez que se identifica con el nombre de “Iquitos” al centro poblado integrado por Napeanos e Iquitos es el mapa de Francisco Requena publicado en 1796, documento a partir del cual
la administración del Estado virreynal y republicano conocieron en su actual ubicación a Iquitos, y como localidad que con el paso del tiempo sería la Gran Ciudad Capital de la Amazonía Peruana.
Finalmente, hacemos votos porque nuestros amables lectores profundicen sobre la información que hoy alcanzamos con motivo de conmemorarse éste el 170 aniversario del nacimiento del Primer Juez de Loreto y mayor escritor de nuestra Amazonía, don Jenaro E. Herrera Torres.