- Caso Mila: Pruebas revelan violación antigua y más de un agresor.
Juez informó graves deficiencias en la investigación de la Fiscal: incongruencia del tiempo en que ocurrió el delito y el embarazo; la identificación de más de un agresor (que extrañamente no ha sido incluido como investigado por la Fiscalía), y una ficha de riesgo de la víctima incompleta.
El juez de la Corte Superior de Justicia de Loreto, Bernuel Espíritu Portocarrero, está en el ojo de la tormenta por no haber dictado la prisión preventiva de un hombre (padrastro), a quien se le investiga por ser presunto violador de una niña de 11 años, conocida como “Mila”.
Sin embargo, tras una entrevista con el juez, se pudo conocer los elementos cruciales que consideró en su decisión, los cuales ponen en evidencia las graves deficiencias de la investigación de la fiscal María Luisa Vegas Pérez, y que se presentan a continuación:
El Ministerio Público imputa a Lucas Pezo Amaringo haber violentado sexualmente a una menor de 11 años, y que el último acto vejatorio fue el 2 de julio de 2023, en el caserío San Lucas, provincia de Maynas. Sin embargo, en su análisis, el juez advirtió que dichos elementos presentados por el Ministerio Público no justificaban de manera contundente la vinculación del imputado por lo siguiente:
El Ministerio Público sostiene que la última violación se produjo el 2 de julio del presente año; sin embargo, el peritaje médico practicado a la menor el 3 de julio (al día siguiente) no da cuenta de un acto vejatorio reciente sino antiguo (certificado médico legal N° 009285-E-IS), lo cual no vincula con certeza al padrastro con dicho hecho.
Asimismo, el período de inicio del embarazo tampoco coincide con los años en que la menor indica sufrió las vejaciones.
Pese a los resultados de la pericia de medicina legal, el perito -sin tener la certeza del acto vejatorio-, emitió un pronunciamiento sin sustento.
A ello, se suma la versión de la agraviada, quien también hace referencia de una violación anterior, producida por una persona distinta.
La víctima también dio a conocer a su madre y padrastro la violación que sufrió por otra persona, quienes extrañamente no tomaron acción al respecto.
Otra falencia del Ministerio Público observada por el juez, fue la presentación de la ficha de valoración de riesgo de la víctima, la cual está vacía en todos los ítems, excepto en una marcación que indica riesgo severo.
La apelación
Sobre este proceso, la Primera Sala Penal de Apelaciones de Loreto, ha programado la audiencia de apelación para este 16 de agosto, a horas 12:00 p.m., y deberá, conforme a ley, analizar y tomar decisión del caso sobre el expediente primigenio (inmodificable) de la Fiscal, el cual tiene dichas graves falencias.
Por ello, en virtud de la reciente autorización del aborto terapéutico a la menor, es indispensable se practique la prueba de ADN al feto, que permitirá esclarecer este caso donde existiría más de un agresor quien no ha sido incluido como imputado por la Fiscal: una evidente negligencia.
Igual de escandaloso resulta que la Fiscal no haya profundizado la investigación a partir de las declaraciones de la víctima en Cámara Gesell, quien –como se informa- ha manifestado que su madre y padrastro hicieron caso omiso a la violación que ella sufrió por un sujeto años atrás. Otra evidente negligencia del Ministerio Público, que obstaculiza la administración de la justicia a todos los que estarían implicados en el caso.





