Prevenir antes que curar.

Un descarnado artículo publicado en una revista capitalina, nos ilustra sin remilgos ni sutilezas sobre el peligro inminente contra la vida del hombre, cuando éste está expuesto por un período excesivo al rigor de los rayos solares, los mismos que por su alto contenido de rayos ultravioleta, cuando algún sector de la piel está expuesta por más de 15 minutos al aire libre, sufre los efectos de una insolación grave que la mayoría de los casos degenera en cáncer a la piel.

Según señala la citada información, en el Perú la Región Arequipa es la que posee las más altas radiaciones solares del mundo, lo que permite que cada año se den más  de 150 casos de cáncer de piel.

Una explicación más técnica proviene de la opinión de médicos especializados que señalan que los lunares que son consecuencia de una prolongada  exposición solar de la piel, son tumores benignos que pueden ser preludios de cáncer de piel. Existen varios casos, entre ellos el de un campesino de 68 años, del valle interandino del Majes que trabajaba desde su juventud en labores de campo y expuesto al calcinante sol arequipeño. Cuando es atendido en neoplásicas del sur, llega al lugar en silla de ruedas pues no puede caminar. Después de los exámenes de rigor le diagnostican  cáncer generalizado, manifestado en un tumor gigantes en la zona de la pelvis además de otras complicaciones. Ahora recibe solo paliativos para combatir los dolores que le     causan la enfermedad.

En otro acápite del informe,  se lee que el índice  de radiación que soportó Arequipa en el último verano, fue de 14 cuando el índice UV-B que podría decirse normal es de 10; aquí se  advierte que sobrepasar dicho límite es sumamente riesgoso.

Históricamente en el Perú, Arequipa, Tacna y Moquegua reciben los mayores volúmenes de  energía solar en el día. El promedio, dice la nota, alcanza los 7.5 Kw hora por metro cuadrado, dicho valor no es superado por ninguna región del país, ni siquiera Iquitos que a veces supera los 40 grados centígrados a la sombra.

Hay que tener en cuenta que la energía solar tiene sus lados dañinos y esos son   los Rayos Ultravioleta (RUV-B)  que traspasan la piel y comienzan a generar cambios en las células. En la selva la ventaja de tener una foresta tupida sirve de amortiguamiento al efecto del RUB-B, pues los árboles y plantas silvestres absorben los rayos solares, lo que no sucede con el asfalto o el cemento  que hacen rebotar el calor.

Un comentario sobre “Prevenir antes que curar.

  1. Hola, amigos de la región, me gustaria saber el link de esa pagina, es muy interesante si ponen imagenes o en todo caso la Fuente de la noticia para poder ver la magnitud de los daños en la piel. y de paso los invito a visitar el blog de la Asociación Civil Fundación Loreto ==> http://www.fundacionloreto.blogspot.com

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