“El desempeño de la actividad económica en la Amazonía no fue muy alentador en términos de bienestar para sus poblaciones en este 2023 que culminó, al presentarse un mosaico de problemas que no fueron resueltas en su oportunidad, que no se adelantaron a sus acontecimientos como prioridades de acción, o sus intervenciones no fueron efectivas en su calidad para entender la satisfacción de los usuarios que buscan de sus instituciones valor público constituido.
En general, la Amazonia registró una caída parcial (al tercer trimestre) de 0.2 por ciento por la acción de los departamentos de Ucayali (-2.2%) y Madre de Dios (-1.1%) y atenuados por el comportamiento de San Martín (1.8%), Loreto (0.3%) y Amazonas (0.1%) cuya base productiva se asienta en actividades primarias de producción, como agropecuaria, pesca, hidrocarburos.
Así como un pálido tejido agroindustrial sobre la base de frutales nativos, y cultivos como el café, cacao y palma que son los tres productos estrellas donde organizaciones de productores privados realizan sus mejores esfuerzos para garantizar la continuidad de la producción en el marco de la Ley de promoción de inversión en la amazonia y del convenio de cooperación aduanera peruano-colombiano, aún vigente desde 1938.
Pero cada uno de estos territorios tienen sus propias dinámicas y realidades, semejantes unos a otros, pero distintos en la forman como encaran sus complejas situaciones en miras de alcanzar benéficos colectivos en áreas donde la riqueza natural es abundante con desafíos permanentes para lidiar con elementos que se esfuerzan para penetrar aún más sus actividades ilícitas y delictivas en un entorno institucional debilitado para la acción y su combate efectivo, como también de un temperamento político que da señales de una mancomunidad efectiva.
Madre de Dios, primero, y Loreto, después, encarrilado a continuar con destruir patrimonio natural y sus fuentes de vida en un territorio donde no se destraba planes concretos de cómo enfrentar estos problemas y peor aún, de cómo alcanzar puntos de inflexión para tallar alternativas viables e ir recuperando espacios que, si no lo enfrentamos ahora, Loreto entrará, dentro de poco, en un caos dominado totalmente por la inseguridad física, informalidad, y actividades ilícitas y delictivas.
La crisis económica en la Amazonia abarca distintos niveles, en el caso del departamento de Loreto la profundidad de la crisis abarca componentes sociales (en Prospectiva Amazónica N°499-2023; 08/08/2023) y financieros (en Prospectiva Amazónica N°508-2023; 07/12/2023) detallados en su oportunidad para dar cuenta de una interrupción de la cadena de pagos al quebrarse el nivel de empleo formal por la rigidez del mercado laboral al no evolucionar ni adaptarse a las condiciones y exigencias del mundo global”. Parte del interesante aporte del Econ. Roger Grández Rios, de fin de año.