-La empresa que realiza el trabajo es de propiedad del arquitecto Rusbell Ferry quien fue agredido por los protestantes cuando se dirigió al lugar para encontrar la solución a este problema y lleguen a un acuerdo.
«No es posible que el señor Rusbell Ferry haga lo que le dé la gana, cómo va a botar del trabajo a más de 20 obreros, a caso no sabe que muchos de nosotros somos padres de familia, cómo es posible que nos pague menos que a los otros de construcción civil», dijo uno de los obreros.
«Nosotros ganamos la mitad que ellos y encima nos hacen firmar boletas en blanco y no nos pone en planilla, por eso es que estamos tomando esta medida de paralizar la obra y no dejar que continúen con los trabajos en este sector», dijo otra trabajadora despedida.
Ayer cerca de las 9 de la mañana un grupo de vecinos de las calles Los ángeles, Los lirios y Las Begonias que supuestamente denunciaron ser despedidos arbitrariamente por la empresa del Arq. Rusbell Ferry, tomaron como medida de lucha paralizar la obra que se venía ejecutando en el distrito de San Juan.
Los moradores quienes fueron contratados por esta empresa denunciaron presuntas irregularidades en sus contratos indicando que les hicieron firmar boletas en blanco, que les pagaban 200 soles, mientras que a los agremiados a la CGTP les pagan 400 soles.
También se quejaron porque les culparon de haber robado materiales de construcción. Todo esto indigno a los 25 obreros que fueron despedidos y se dirigieron hasta la obra para no permitir que sigan trabajando en ella.
Minutos más tarde, conocido el caso, se acercó hasta el mismo lugar de los hechos el Arq. Rusbell Ferry para calmar los ánimos y llegar a un acuerdo con los dirigentes de los trabajadores despedidos, sin embargo fue atacado por los protestantes.
En una escena de iras incontenidas, le echaron arena y hasta le quisieron agredir físicamente, pero de allí no pasó a más. «es normal que la gente te quiera agredir ya pasé por esto y no es la primera vez», dijo al momento que lo abordamos.
«Ellos sabían que se les iba a sacar de la obra en algún momento, sus dirigentes tenían conocimiento del tema, ahora si ellos no les avisaron, no es mi culpa, se les comunicó que por falta de cemento la obra tenía que rescindir el contrato de algunos obreros hasta que nuevamente llegue el cemento.
Es decir, que sí se les iba a llamar otra vez, porque esta obra necesita de más de 100 trabajadores para poder culminarla y ellos lo saben muy bien, así que espero llegar a un buen acuerdo con los dirigentes y dejen continuar con los trabajos», expresó el empresario.
Mientras tanto los obreros despedidos esperan que el arquitecto cumpla con su palabra y sean nuevamente repuestos en sus labores para que no se vean perjudicados en la canasta familiar ya que este trabajo que tienen es el único sustento económico para sus familias. (C. Ampuero)





