Nativos retienen a tres gerentes de empresas contratistas de Petroperú

  • Exigen 300 mil soles para liberarlos

El último sábado 01 de abril, un grupo de personas pertenecientes a la Federación Wampis del Perú-FENAWAP, presidido por Segundo Sumpa Mayan, retuvieron a tres gerentes de las empresas contratistas locales Oasis, PP Morona y  Barbilla que vienen laborando en las tareas de limpieza y remediación en el km 206 del oleoducto Nor Peruano.
Según el comunicado de la empresa de Petroperú, el secuestro se registró en la comunidad de Mayuriaga, distrito de Morona y responde a conductas extorsivas por parte del presidente de la FENAWAP, quien exige el pago de 300 mil soles a estas contratistas para permitir la continuidad de las tareas de limpieza y remediación.
Según se conoció, estos hechos han sido precedidos por una serie de amenazas por parte de esta organización, señalando que tomarán los campamentos de Petroperú y sus contratistas (donde pernoctan cerca de 300 personas), si no son informados sobre la contratación de personal para las labores de limpieza y remediación.
Todo ello consta en un acta suscrita por dichos líderes de la federación en mención y representantes de la comunidad de Mayuriaga.
Entre tanto, 21 comunidades del Morona han manifestado su preocupación y rechazo por estas acciones emprendidas por la FENAWAP y vienen  solicitando garantías para proteger la integridad física de los integrantes de sus comunidades que laboran en el km 206.
Por su parte, la empresa petrolera peruana ha realizado las denuncias correspondientes por extorsión agravada y ha solicitado a la sub prefectura las garantías para salvaguardar la seguridad de los trabajadores que vienen laborando en dicha contingencia, las que permitirían continuar y concluir con las tareas de limpieza y remediación  en el km 206 del oleoducto Nor Peruano.
Asimismo, se supo que el señor Sumpa Mayan ha sido denunciado anteriormente por secuestro, proceso que hasta ahora se encuentra en curso.
Finalmente, Petroperú indicó que rechaza estas medidas de fuerza que ponen en riesgo la vida de los trabajadores de la empresa, sus contratistas y trabajadores de la comunidad, quienes venían realizando sus actividades con normalidad e insta a mantener la paz social en beneficio de la población y del país.
(C. Ampuero)