Corte de Loreto rinde homenaje a héroes en el 91° Aniversario del Combate de Güeppí 

  • La Corte Superior de Justicia de Loreto participó en la ceremonia solemne con motivo del “91° Aniversario del Combate de Güeppí”, realizada en la ciudad de Iquitos.

Durante el acto cívico, la institución rindió homenaje con una ofrenda floral ante a la estatua del Sargento Fernando Lores Tenazoa, héroe destacado de esta batalla quien fue el último en caer de la trinchera, y se inmoló para evitar ir a manos del enemigo.
Además, se honró la memoria de otros soldados peruanos como Vargas Guerra, Elías Soplín Vargas y los hermanos Reátegui Bartra, quienes, con igual entrega y coraje, defendieron nuestro territorio, dejando un legado de patriotismo que perdura en nuestra historia.
Batalla de Güeppí                
El Combate de Güeppí tuvo lugar el 26 de marzo de 1933 durante la Guerra Colombo-Peruana, en la región fronteriza entre Perú y Colombia, cerca del río Putumayo. Un total de 194 soldados peruanos se enfrentaron a cerca de mil colombianos, en una lucha intensa y tácticas de guerra en la densa selva amazónica.
El conflicto surgió por disputas territoriales en la Amazonía, donde dichos países buscaban afirmar su dominio sobre áreas ricas en recursos naturales y estratégicamente importantes.
Este hecho histórico es símbolo de lucha por la soberanía y la integridad territorial, siendo parte fundamental de la historia de la región amazónica y del Perú.
Antecedentes
Hasta antes de 1802, estas tierras formaron parte del Virreynato de Nueva Granada, y en su jurisdicción se hallaba el territorio de Maynas, en la selva amazónica, el cual se convertiría con el tiempo en el centro de la discordia entre el Perú y Colombia.
Con la Real Cédula de 1802, instrumento jurídico cuyo autor fue Francisco Requena durante su cargo de primer Gobernador de Maynas, se ordenó que cerca de 500,000 kilómetros cuadrados de territorio se incorporen al Virreinato del Perú, entre ellos, Maynas. Su papel fue decisivo para la anexión de estos territorios a la heredad nacional.
Posterior a la Real Cédula, y con la independencia de las nacientes Repúblicas de Hispanoamérica, se puso en cuestión la vigencia de la anotada Real Cédula de 1802. La entonces Gran Colombia, y luego las nacientes Repúblicas de Colombia y Ecuador pretendieron desconocerla en diferentes momentos del curso de la historia, como lo fue en la Guerra Colombo-Peruana, y la Batalla de Gueppí.
Sin embargo, nuestro país defendió la validez jurídica de esta Cédula, proclamando la plena vigencia del principio Uti Posidetis en la delimitación de las fronteras territoriales de las nuevas Repúblicas.