- Milena Mallorga, ejecutiva del Parque Ecológico Mundo Amazónico de Leticia.
- “Todo el personal que trabaja con nosotros pertenece a una etnia indígena”.
Conocer más de nosotros mismos como amazónicos desde otros enfoques, costumbres y saberes, con recursos naturales similares pero conocidos con nombres diferentes, y valorados en su dimensión ancestral y científica, cierto que resulta fascinante experimentarlo. Es lo que vivimos en el Parque Ecológico Mundo Amazónico de la vecina ciudad de Leticia, lado colombiano en la triple frontera por el río Amazonas.
Es una combinación del tema amazónico con lo educativo y acciones que le dan sostenibilidad, además que fue levantado en un área deforestado por proyectos ganaderos que no dieron resultado. Sobre este paradisiaco lugar nos habla una de sus ejecutivas, Milena Mallorga.
“Ha sido un trabajo maravilloso el parque ecológico Mundo Amazónico lleva ocho años con puertas abiertas al público, pero hay diez años atrás de trabajo. Empezó mucho antes por hacer conservación de la flora amazónica”, nos dice con el disfrute de hacer lo que les gusta, de valorar la naturaleza.
“Cuando incorporamos los elementos turísticos pudimos darle sostenibilidad económica y se ha tomado muy bien. Se ha convertido en un laboratorio vivo para prácticas escolares, universitarias, la población local lo ha cogido y ahora se volvió sitio obligatorio para el turista que viene al Amazonas, pasa por aquí. Se dice ven, conoce y aprende”, dice Mallorga.
“Para nosotros hay un perfil definido, uno que tienen que ser locales indígenas. Todo el personal que trabaja con nosotros pertenece a una etnia indígena y tienen que haber cultivado la tierra y así conocen de plantas, como cuidarlas, porque aquí hay que hacer mantenimiento todos los días”.
En efecto, es uno de los atractivos encontrarte con jóvenes y adultos que hablan del lugar con el encanto de lo auténtico y con preparación científica y de sus ancestros indígenas amazónicos colombianos.
“Con ese conocimiento nosotros les damos capacitación de servicio al cliente y hacemos algo más en lo que son las plantas y la flora, y los animales como el avistamiento de aves, un poco más hacia el lado de biología y de ingeniería ambiental, un conocimiento un poco más técnico, pero cada uno puede brindar su conocimiento desde su interior, por su vivencia personal y muy bien entregado a todo público”.
Al Parque Ecológico Mundo Amazónico de Leticia, una ciudad tan cálida como nuestro Iquitos, llegan turistas de todo el mundo, pero la gran mayoría siguen siendo colombianos. “Europeos vienen muchos del lado de España, Alemania, Holanda, y nuestros hermanos peruanos y brasileros son como los locales”.
Milena se despide de nosotros, la delegación de operadores turísticos peruanos que participaron en un encuentro de intercambio, dejando para otra visita la posibilidad de acampar “y disfrutar del amanecer, de las aves. “No tenemos animales en cautiverio, sino que están libres y vienen gracias a la riqueza de frutos y de palmas que tenemos. Han hecho aquí su hogar”.
(Diana López M.)