Algo más sobre la Corrupción

Por: CPC Carlomagno Grández Vásquez

No quiero abundar en más hechos que ya son de conocimiento de toda la opinión pública sobre este mal cancerígeno que se apoderó de nuestro país. Si bien es cierto, la corrupción como tal, apareció en la humanidad desde la creación del hombre; Adán y Eva pecaron al desobedecer a Dios cuando les dijo que no coman la manzana, este acto señores es corrupción, es como si en la actualidad alguien te dijera no robes y lo haces, luego pasamos a los hermanos Caín y Abel, aquí hubo un asesinato y por lo tanto es un acto de corrupción.

Para seguir ahondando más en nuestro comentario, primero vamos a definir la palabra Corrupción, ésta proviene del vocablo latino «corrumpere» que significa «echar a perder»; según algunos estudiosos del tema, Corrupción significa  el mal uso del poder para obtener ventajas que no son legítimas, desde luego, en secreto y privadamente; en el caso de nuestros gobernantes de turno sería aumentarle la palabra público o sea «el mal uso del poder público…»

El concepto de corrupción es relativo, ya que este varía en dependencia del país o la jurisdicción. Ocurre que algunas prácticas políticas pueden ser legales en un lugar e ilegales en otros, las formas de corrupción más comunes, pueden ser entre otras: la malversación, patrocinio, extorsiones, sobornos, fraudes, y el nepotismo, todo lo cual facilita a menudo otro tipo de hechos criminales como el tráfico de drogas, lavado de dinero, y la prostitución; algunas causas que pudieran generar estos actos de corrupción pudieran ser: excesivo poder discrecional, salarios bajos, baja responsabilidad, poca transparencia, poca educación, principios éticos poco desarrollados entre otras.

Resumiendo la palabra Corrupción, significaría: «Cambiar la naturaleza de una cosa, volviéndola degradada o mala».

Los países desarrollados tampoco escapan a este tipo de actos, como un ejemplo, en Estados Unidos se dio el caso Enron Corporation, que después de ser una pequeña empresa de gas en Texas, pasó a ser el sétimo grupo empresarial de mayor valor en Estados Unidos gracias a la habilidad de Arthur Andersen en llevar doble contabilidad para ocultar deudas por más de seiscientos millones de dólares. Este personaje Arthur Andersen era el auditor de la empresa Enron y emitió informes de auditoría haciendo ver que la empresa marchaba bien. Cuando se descubrió el fraude miles de personas perdieron ya sea sus acciones o empleos a tal punto que el gobierno de George Bush tuvo que intervenir mediante la emisión de la Ley Sarbanes-Oxley la misma que controlaba y regulaba este tipo de transacciones.

Caso parecido sucedió hace poco con la crisis financiera en este mismo país, que sacudió no sólo la economía estadounidense, sino tuvo repercusiones mundiales que generó la caída muchas bolsas de valores en diversos países. Pero por qué se dio esta crisis, fue por el poco control o supervisión por parte del gobierno hacia las empresas mobiliarias que otorgaban créditos hipotecarios.

Ahora pasemos a nuestro país, cuáles son los actos de corrupción más conocidos desde nuestra época republicana, solamente para hacer un repaso de algunos hechos:

Mariano Ignacio Prado Ochoa, En 1876 volvió a asumir la Presidencia de la República y en medio de una grave crisis económica tuvo que enfrentar el inicio de la Guerra del Pacífico. Cuando Chile comenzó a cosechar victorias, Prado viajó a Europa para comprar armas para el ejército peruano, llevando consigo una gran cantidad de dinero, joyas y objetos de valor recolectados por las Damas de Lima para la defensa del país. Luis La Puerta quedó como presidente provisorio.

Sin embargo Prado no regresó al país, sino hasta después de la guerra en 1887, sin nunca dar cuenta del dinero ni de las joyas que se llevó.

En 1920 Leguía aprobó una nueva Constitución que no contemplaba la reelección presidencial inmediata. Sin embargo, en 1923 modificó un artículo constitucional e introdujo la reelección «por una sola vez». Y luego de ser reelecto, volvió a modificar la Constitución aceptando la reelección indefinida: «el presidente durará en su cargo cinco años y podrá ser reelecto», decía la norma. Estas reformas, en manos de un congreso siempre sumiso, permitieron que Leguía permanezca once años en el poder.

En 1931, se organizaron elecciones en las cuales Sánchez Cerro resultó electo. Pero los apristas consideraron que hubo fraude y declararon a Víctor Raúl Haya de la Torre como «presidente moral del Perú». Fue en su gobierno que estalló el conflicto con Colombia, Sánchez Cerro dio todo su apoyo a la Junta Patriótica de Loreto que recuperó Leticia y cuando estaba pasando revista a un contingente de 30,000 soldados que iba a enviar a Iquitos para que apoyen en la recuperación de Leticia, es asesinado.

LA TRAICIÓN DE BENAVIDES Y LA  ENTREGA  DE  LETICIA

En la infamante entrega de Leticia a favor de Colombia se registran tres acontecimientos históricos son insoslayables:

1.         La firma del baldón que significó el tratado Salomón-Lozano firmado en secreto por el tirano Augusto B. Leguía el 24 de Marzo de 1922.

2.         La recuperación de esa provincia peruana por la Junta Patrótica de Loreto en 1932.

3.         Y, finalmente, el desconocimiento de esa gesta patriótica y la devolución de Leticia consumada por Óscar R. Benavides, después de perpetrado el magnicidio del presidente Luis M. Sánchez Cerro.

Sánchez Cerro, había afirmado que la entrega de Leticia fue objeto de una transacción monetaria.

Más de un diario peruano afirmó que Lozano pagó sumas de dinero por la firma del convenio. Según Luis Miguel Sánchez Cerro, sucesor de Leguía, el tratado costó siete millones de pesos…»

El 27 de octubre de 1948, otra vez Arequipa se levantó contra el gobierno constitucional, y el Gral Manuel A. Odría dirigió un golpe que derrocó al presidente, al cual se le acusó de fomentar la anarquía. Odría convocó a elecciones para legitimarse, pero participó solo, mandó a la cárcel al otro candidato, también tuvo su «Montesinos»: Alejandro Esparza Zañartu, un siniestro personaje quien se desempeñó como director de Gobierno y como ministro de Gobierno (hoy del Interior).

En las elecciones de 1962 Haya de la Torre quedó en primer lugar, Belaúnde Terry en segundo y Odría en tercero, pero no hubo un ganador con mayoría absoluta, el Congreso debía elegir al nuevo presidente. Era vox populi que había habido fraude.

Fernando Belaúnde no trajo la ansiada estabilidad al Perú. En 1968 su gobierno firmó un convenio con la International Petrolium Company que tuvo el apoyo multipartidario. Pero el Director de la Empresa Petrolera Fiscal, Carlos Loret de Mola, denunció que había desaparecido la página once del acuerdo, donde estaría estipulado el monto de la indemnización que pagaría el Estado a esa empresa.

El gobierno de Velasco nacionalizó los recursos, reformó el agro, la educación, expropió las empresas, los bancos y los medios de comunicación.

Morales Bermúdez estuvo cinco años en el poder y durante su gobierno continuaron confiscados los diarios y canales de televisión. También siguieron los encarcelamientos y las deportaciones de los críticos al gobierno. Fue entonces que se engendran las rebeliones y el terrorismo que sacudirían al país durante los años 80 e inicios de los 90.

Posteriormente a estos gobiernos les sucedieron el de Fernando Belaunde (segundo período), Alan García, Alberto Fujimori, Alejandro Toledo y actualmente Alan García (segundo periodo). A todos estos presidentes conocemos cómo gobernaron, está demás hablar de ellos.

Otro problema sobre corrupción que no se está dando la importancia debida, es la corrupción ambiental, en nuestra región hay derrames de petróleo que siempre se dieron por las exploraciones que se hacen, pero ningún gobierno es capaz de tomar al toro por las astas, más bien están los intereses personales favoreciendo a las empresas petroleras tratando de minimizar estos actos y persiguiendo a quiénes protegen nuestro ambiente.

Así pues, el mal ejemplo viene desde arriba los presidentes de la república, que siempre han actuado de espaldas al pueblo y eso es lo que más imitamos y aprendemos rápido.

Es por este motivo, que ante la proximidad de las elecciones regionales y municipales, debemos saber elegir, no actuar como simples borregos que hacen y dicen lo que sus altos dirigentes partidarios ordenan.

Estos casos expuestos no deben repetirse, es tiempo de cambiar en nuestra región, cuántos años venimos percibiendo dinero del canon petrolero (millones de dólares), y cómo estamos. Por qué estamos así?, es fácil la respuesta, más puede el poder del dinero, el poder de figurar, el poder de tener todo bajo control sin importarnos la población o vivientes de la región que fueron los que nos eligieron para ser sus autoridades.

No dejemos que pase más tiempo para empezar a combatir esta enfermedad incurable, porque si no lo hacemos, sin darnos cuenta estaremos inmersos en sus garras de donde va ser muy difícil salir y qué cuentas le daremos a las generaciones venideras.