- Opina el Prof. José Manuyama, miembro del Comité de Defensa del Agua.
A él se le consultó sobre la preocupación de los comuneros del distrito del Nanay, de manera específica de la comunidad “Diamante Azul”, quienes han alertado sobre las aguas turbias que se registran, lo cual los deja a ellos sin poder consumirla, ni utilizarla en sus quehaceres diarios.
“Todos esos impactos diversos y silenciosos que se han advertido, ahora se están dando ahí. Advertencias científicas sobre la alteración del río Nanay que genera la remoción del lecho del río. Así como arrojar mercurio a sus aguas, tiene su impacto.
El Nanay ha perdido color. Siempre ha sido oscuro, de aguas negras, pero ahora se ha vuelto de un color parecido al Amazonas. Cuando se encontraban los dos ríos se notaba más el contraste de las aguas negras y aguas blancas, como se le dice al Amazonas. Ese cambio de por sí ya es una consecuencia incalculable.
Porque el río Nanay ha mantenido por miles de años sus características, su temperatura, incluso es un río de migraciones de grandes bagres. Yo pienso que la fauna ictiológica que ahí se ha desarrollado empezará a migrar. Y la gente que por años ha estado ahí, ya no tendrá cómo abastecerse del río Nanay, es un gran problema.
¿Entonces es importante la Cumbre Amazónica que se desarrollará dentro de poco?
-La cumbre es una vez más el llamado que hace la sociedad civil, la organiza el Vicariato de Iquitos y convoca a líderes, a organizaciones sociales ambientales, no solo de la región, sino del país. En el fondo es una respuesta a la burla porque en el caso de Amazonía la minería es un delito, a diferencia de los Andes en donde juegan entre la ilegalidad y la legalidad. En la Amazonía la minería está prohibida.
Entonces solo hace falta aplicar la ley, no se necesitan más normas. Lo que antes eran 10 dragas, ahora son 100 y luego serán 200 a más. Si se hubiera actuado a tiempo no se habría incrementado este número.
Pero crecen porque hay un Estado y varias instituciones que no cumplen con su labor, tanto por negligencia, como por corrupción o complicidad. Ahí tiene que ver la Marina, la policía, el gobierno regional, los ministerios, migraciones. Es el Estado en pleno que no ejerce lo que debe ejercer.
Por otro lado. Vemos a tantos alumnos en este colegio (CNI) y pensamos qué harán dentro de poco en Loreto, donde no hay tantas fuentes de trabajo…
-Las estadísticas de los chicos que entran y egresan de la universidad, son muy reducidas y hay una gran población juvenil que no estudia, ni trabaja. ¿Será por eso que hay bandas o jóvenes alcoholizados o drogados, sin alternativas?
Y tenemos tanto dinero en la región. Nunca hemos tenido en el Estado tanto dinero que se malgasta en malas obras o en la corrupción misma. Este drama alguna vez tendrá que acabar y será cuando la población esté organizada. (LMHL).
