Ubicando en el contexto de la noticia diaria, el estado en que están las cosas entre el SUTEP y el Ministerio de Educación, resulta muy difícil que el conflicto que viven ambas entidades, tome un cariz diferente, logrando acercarse a un punto de convergencia que augure una solución final, sobre todo teniendo en cuenta que el SUTEP en este paro va como furgón de cola de la CGTP.
Si se tiene en cuenta que toda huelga contiene un serio problema económico para los afiliados al SUTEP, dada la posibilidad que el Ministerio del ramo decida no pagar los días no laborados en esta huelga, estimamos que allí radicará el primer tema del posible diálogo, como ya ha sucedido en otras oportunidades.
Ahora, si accedemos a la visión de los especialistas en el tema, que el SUTEP en esta ocasión ha exagerado la nota, pues, como afirman expertos en la materia, las motivaciones de su huelga no están claramente definidas, nos encontramos ante un escenario donde tirios y troyanos se sienten dueños de verdades que habrá que discernir mediante el concurso de neutrales.
La neutralidad podría provenir de las APAFAS, cuyos presidentes podrían ser quienes diriman si la huelga es legal o no, ya que tales dirigentes según la estructura orgánica, de tales instituciones, son los principales testigos de toda la vida magisterial; y su participación podría considerarse vital, para lograr un acuerdo que ponga punto final a un conflicto donde el único perjudicado es el niño o joven alumno de nuestras escuelas públicas.
Hace algún tiempo sobre el mismo tema decíamos que como ciudadanos, conscientes de la realidad de nuestra educación, basada en la preparación profesional de nuestros educadores, estimamos que debería existir antes de ir a medidas radicales, un debate público entre maestros, entiéndase bien, decimos maestros y no dirigentes del SUTEP, con el suficiente conocimiento del tema para que debatan con el Ministro de Educación o especialista en educación del gobierno, sobre si los reclamos de los maestros son reales o de solución inmediata; o por el contrario, podrían ser solucionados mediante comisiones designadas por ambas entidades, mientras las clases siguen desarrollándose con normalidad.
Sin duda aquí se hace necesario señalar que tales debates sean debidamente transmitidos a toda la población, lo que permitirá, estamos seguros, que toda la ciudadanía se entere del tema y colabore con aportes que podrían venir de expertos en dichos temas, o también de padres de familia interesados en lograr soluciones prácticas y definitivas.
Aquí creemos que el periodismo, por su parte, jugará un rol expectante, si lejos de exacerbar ánimos, se suma a la idea de lograr una solución que corte con una medida de fuerza que, causaría mucho daño al sector más sensible de nuestra población LOS NIÑOS Y JÓVENES QUE QUIEREN ESTUDIAR.
estimados amigos de loreto, hablar del sutep, es hablar de la verguenza, el infortunio, la traición y la deslealtad de sus dirigentes, que cuando la cosa escapa a sus inrtereses, abandonan a sus alicaidos y estupidos miembros que aún creen en estos golfos dirigentes que para remate de males aportan su magro dinero para que esta lacra de sátrapas que andan con el maletin lleno de falsedades y abyectas ideas se llenen los estómagos de buenos manjares, miemtras los «pedagogos» de la región luchan por lograr una plaza y con ello tener una vida mas o menos decorosa.Ese matriarcado sutep-educación aún continuará mientras no exista una política educativa que apunte a resolver tanto el sistema de enseñanza como la politica de contratación y ombramiento sin tanto embrollo y engorrosos trámites que ha puesto a mas de un maestro en la desesperación y la locura por conseguir completar sus files,y que decir de las comisiones, que han dejado cientos de maestros sin contrato pòr dar preferencia a sus allegados.