Hemos estado visitando la zona del último incendio registrado en la ciudad de Iquitos, donde 13 hogares prácticamente quedaron en terreno puesto que la destrucción del fuego arrasó con todo.
Como sabemos que el material de madera y hojas de crisnejas en el techo, y aun siendo de calaminas la alta temperatura del fuego hace que se vuelvan inservibles, y los otros materiales como triplay más fácil se consumen con la candela.
Es importante resaltar en estas circunstancias el desprendimiento de familiares, vecinos, amigos, para hacer llegar lo que pueden, hasta de lo que no pueden para contribuir a amenguar en algo la desesperación por lo perdido.
La presencia de las entidades a través de sus trabajadores también, es digno de resaltar, aunque no en una cobertura ideal, pero, también hacen sus esfuerzos para cumplir sus funciones en el marco de las acciones de la defensa civil.
Mención aparte es la labor de los bomberos que con todas sus limitaciones llegan a los lugares del siniestro para combatir al fuego y apagarlo. Aunque hace poco se realizó una actividad de recaudación de dinero, sería importante, dicho sea de paso, que hagan público lo que han conseguido para mejorar en equipamiento y equipos de protección para los hombres y mujeres de rojo.
Los bomberos también cumplen una labor de investigación para conocerse las causas de los incendios, y en la mayoría de los casos o es por explosión de balón de gas, o es por corto circuito. Lo que tenemos que tener muy en cuenta en nuestros hogares para prevenir más tristes desastres.
Y entre las víctimas además de las humanas y lo material, se vienen encontrando las mascotas como perritos, principalmente, lo que suma al dolor, sobre todo está el sentimiento de los niños de la casa, emociones que tenemos que aprender a manejar luego de estas pérdidas dolorosas.
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