Proponen respaldar medida cautelar del Ministerio del Ambiente para paralizar deforestación

– Luego de audiencia pública desarrollada en Tamshiyacu
– Así como exigir que se haga un estudio de suelos para conocer para qué es apto el terreno deforestado.IMG_7554

Por: Luz Marina Herrera.  

El pasado viernes en la noche pudimos llegar hasta Tamshiyacu a invitación del presidente del Frente Patriótico del Distrito de «Fernando Lores» Gremchsh Yumbato. Igualmente había cursado invitaciones para la audiencia pública desarrollada en la plaza del distrito, al vicepresidente del FPL, Prof. Orlando Escudero, así como al vocero del comité del agua, Prof. José Manuyama, al representante de Cáritas Iquitos, Blgo. Manuel Armas, al famoso padre Yván de la localidad, al teniente gobernador, al comisario de Tamshiyacu, así como a pobladores en general que quisieran expresar sus discrepancias, así como simpatías con la empresa Perú Cacao Norte Sac.
Luego de casi una hora donde se propalaron dos videos realizados y difundidos a nivel nacional sobre la deforestación registrada en Tamshiyacu desde el mes de setiembre del año pasado, los invitados y pobladores poco a poco se ubicaron en la plaza para escuchar las diversas exposiciones. Una de las más interesantes resultó ser la del Blgo. Manuel Armas, representante de Cáritas Iquitos, quien prácticamente ha dado a conocer que los suelos de la zona deforestada no servirían para la siembra de Cacao, sino más bien para la temida palma aceitera.
«A nivel nacional toda empresa tiene una responsabilidad social que respetar, cualquiera sea su actividad. Pero acá vemos una total irresponsabilidad de la empresa ante la sociedad. Al ingresar esa empresa ha debido llamarlos de inmediato a ustedes para exponer los pro y los contra del proyecto, pero acá nada y preocupa mucho el saneamiento legal que dicen haber hecho de las tierras. Se han usurpado tierras y eso es un delito.
Lastimosamente cuando hablamos de monocultivos las ganancias siempre son para la empresa y no para el pueblo. Además que hay mucho cuestionamiento a los monocultivos porque absorben y degradan los suelos, empobrecen los suelos, así tenemos la palma aceitera, el cultivo ilícito de la hoja de coca, el maíz. Ese terreno (el deforestado en Tamshiyacu) no está destinado para cultivo de cacao y no sé porqué le han puesto ese nombre.
Creo que está destinado para otros fines como la palma aceitera. Se debió determinar la capacidad de uso del suelo y no se ha hecho, de repente era un bosque protección el que se ha talado o cabecera de cuenca.
No hubo un inventario ¿dónde se fueron las especies maderables? Además se les ha debido mostrar el estudio de impacto ambiental, todo proyecto y peor en grandes extensiones, amerita un estudio de impacto ambiental. No entiendo cómo han cortado millones de árboles si es que el cacao necesita de sombra para crecer, por lo que pienso que la siembra en esos terrenos será de palma aceitera», remarcó Manuel Armas.
Por su parte, el conocido padre Yván, se quedó perplejo al escuchar al biólogo quien dijo que para el cacao se necesitaba de sombra de árboles, entonces al haberse cortado miles, era un signo que sembrarían más bien palma aceitera. «Pienso que con lo escuchado es necesario apoyar la medida cautelar del Ministerio del Ambiente para que el poder judicial paralice toda esa deforestación, ¡ya está bueno!
Luego exigir que pronto se haga un estudio de suelo para determinar para qué es apto el terreno deforestado. Así como una evaluación de todos los impactos negativos registrados. No se puede deforestar bosques primarios para sembrar palma, es contraproducente, todo lo que han deforestado demorará más de 40 años para reponerse, no se puede permitir eso», habló el padre.
A su turno, el poblador de la comunidad «Nuevo Tarapacá», Nilo Tuanama, dijo no gozar ya de la naturaleza, ni de agua limpia para beber. «Vivo años ahí y siempre se podía tomar de las aguas tranquilas y transparentes, se podía pescar, se podía preparar shivé al regresar de la faena, ahora es bien preocupante lo que estamos pasando.  Navego por la quebrada y encuentro peces muertos en la orilla y eso es algo peligroso. Los humanos ya no tenemos confianza en tomar esa agua. Cuando hay sequía o merma la población de Tarapacá agarra agua para tomar y eso es malo. El agua sacada en envases sale con el fondo amarillo, ¿de dónde ya vamos a recoger agua para beber? Es algo bien lamentable», concluyó el poblador.
También hubo quejas en cuanto a lo que la empresa se viene apoderando de terrenos que no adquiere mediante compra de títulos a los pobladores. «Los perjudicados hemos puesto denuncia ante el Ministerio Público porque nos están quitando nuestros terrenos, están atropellando nuestras tierras. Acá no vemos desarrollo, más bien malogran la carretera. Algunos dicen que con la empresa están educando y alimentando a sus hijos ¿acaso cuando la empresa no estaba, no alimentaban o no estudiaban sus hijos? Claro que sí, no ha cambiado nada. ¿Dónde están las autoridades por qué esa empresa sigue haciendo lo que le da la gana con las leyes?», señalaron.
Por otra parte, el presidente del frente de «Fernando Lores», hizo un llamado a sus hermanos para que tomen conciencia de lo que viene ocurriendo con esa empresa. «Ellos han llegado sin pedir permiso, sin mostrar estudios de impacto ambiental, sin explicar qué iban a hacer y porqué estaban tumbando los árboles. Han llegado a dividirnos entre hermanos, estamos afectados en nuestra ecología, los representantes legales nunca dan la cara, el alcalde tampoco está acá para levantar su voz al respecto, no se pronuncia sobre el grave problema por el que atraviesa nuestra localidad», expresó el dirigente ante algunos murmullos de agresión verbal de parte de los que actualmente trabajan para el empresa.
Finalmente, el profesor Orlando Escudero, vicepresidente del FPL, expresó al pueblo su solidaridad y respaldo a la lucha iniciada en defensa de sus tierras, sus recursos naturales y la vida. «Es una actitud criminal la que hace la empresa actuando bajo la fachada de cacao norte, pero en el fondo no será cacao, sino palma aceitera. Es un suelo trabajado para palma aceitera, eso está demostrado técnica y científicamente. En pleno siglo XXI se pisotea las leyes y normas del Estado peruano en el uso de suelo y las normas de protección medio ambiental. Están haciendo lo que les da la gana en Tamshiyacu. En otros países no los dejan hacer eso, pero acá debido a autoridades nacionales y regionales débiles es que pueden sobornarlas, por eso no dicen nada y guardan un silencio cómplice. No dan explicaciones al pueblo», concluyó el profesor Escudero.