Cualquiera que haya visitado Perú diría que es un país con un pie en el pasado y uno en el futuro. Lima, el quinto centro urbano más grande de América Latina, alberga a aproximadamente 10 millones de personas, un tercio de la población total del país, y tiene un horizonte que se extiende con rascacielos, vida nocturna, restaurantes reconocidos a nivel internacional y una creciente comunidad tecnológica. Al mismo tiempo, puedes tomar un autobús o tren en cualquier dirección y llegarás en cuestión de minutos a un mundo “nuevo”, donde se aprecian las culturas antiguas y las costumbres tradicionales.
A pesar de tener una de las economías de más rápido crecimiento en América Latina, Perú está luchando por modernizarse tan rápido como otros países de la región, como Chile, Argentina, México e incluso Colombia. Todavía depende en gran medida de la minería, Perú invierte solo el 0,08 por ciento de su PBI en tecnología e innovación, que es insignificante en comparación con otros países.
Sin embargo, eso no quiere decir que el cambio no esté en el horizonte. Perú es el hogar de una comunidad emprendedora comprometida, que cuenta con el apoyo total del gobierno. La iniciativa StartUp Perú planea proporcionar financiamiento a más de 350 empresas locales a finales de 2018.
Mientras se encuentra en sus primeras etapas de crecimiento, el país tiene todos los ingredientes para un ecosistema de negocios Startup sólido y está comenzando a llamar la atención de inversores externos, empresas y organizaciones.
Es importante señalar que la base para un ecosistema de emprendimiento radica en la educación y un flujo de talento técnico altamente capacitado. Sin embargo, aunque Perú tiene una industria de TI «próspera», el Grupo Neo, una organización que compara y analiza diferentes regiones y países, señala que Perú ya está mostrando signos de escasez de talento técnico.
Para combatir esto, varias organizaciones están surgiendo en Lima ofreciendo rutas alternativas para que los jóvenes se involucren en compañías de tecnología.
Un flujo constante de talento técnico es excelente, pero difícil de aprovechar si un país carece de una red de soporte de Startup para atraer a la gente, despertar interés y ayudar a formular grandes ideas en grandes productos y compañías.
Sin embargo, para motivar a las mentes jóvenes e inteligentes para que inicien proyectos y creen empresas, primero se debe enseñar a la comunidad cómo hacerlo y ofrecerles ejemplos positivos de dentro y fuera del país. Es necesario que haya más comunicación y planificación entre todas las comunidades más pequeñas. Mientras que las organizaciones privadas hacen un gran trabajo estableciendo una cultura de Startup e inspirando mentes jóvenes, el mayor impulso hasta la fecha proviene del propio gobierno peruano. El actual presidente, Pedro Pablo Kuczynski, ha intentado fomentar un entorno favorable a los negocios y ha prometido que la inversión en ciencia, tecnología e innovación será una prioridad de su administración, como un medio para reducir la dependencia del país de la minería.
