“Nos asaltan en manada y nadie hace nada”

  • Sostuvo la exdecana del Colegio de Obstetras de Loreto.

La noche del último fin de semana se tiñó nuevamente de temor el corazón de Iquitos. Dos trabajadoras del sector salud fueron brutalmente asaltadas por una banda de delincuentes que operan como falsos mototaxistas, en la cuadra 8 de la calle Loreto, pleno centro de la ciudad. El caso ha causado profunda indignación, no solo por el monto robado, sino por la inacción de las autoridades ante una modalidad criminal que ya se ha vuelto recurrente.
Una de las víctimas fue la obstetra Noelia Imán Chumpitaz, reconocida profesional de la salud y exdecana del Colegio de Obstetras de Loreto, quien fue interceptada junto a su acompañante cuando retornaban a casa a bordo de una motocicleta. Los delincuentes actuaron en grupo —en lo que parece ser una “manada”— y no solo las despojaron de sus pertenencias, sino que intentaron llevarse el vehículo en el que se desplazaban.
El botín arrebatado a las profesionales asciende a más de 10 mil soles entre dinero en efectivo (1,500 soles), un iPhone 16 de última generación y una pulsera de oro. Las cámaras de videovigilancia de un negocio cercano registraron el hecho y confirman el violento accionar del grupo delictivo.
“No había un solo patrullero, ninguna señal de una ciudad segura, ni presencia de autoridad alguna. Solo delincuentes”, expresó con impotencia la exdecana Noelia Imán, quien rompió su silencio a través de un mensaje público dirigido directamente a las autoridades de turno.
INDIGNACIÓN CIUDADANA: “¿QUÉ MÁS FALTA, QUE NOS MATEN?”
En un mensaje directo y sin rodeos, Imán Chumpitaz denunció el abandono en que se encuentra la ciudad en materia de seguridad:
“Señores autoridades, llevo más de 25 años viviendo en Iquitos y he visto cómo la inseguridad ha rebasado todo límite. ¿Qué más falta? ¿Que nos maten? Trabajamos duro para obtener nuestras cosas y por culpa de unas gestiones ineficientes, nos vemos expuestos cada noche a este infierno urbano”.
La obstetra también rechazó los cuestionamientos que suelen hacerse a las víctimas por estar en la calle de noche:
“La justificación nunca debe ser por qué uno está fuera de casa en la madrugada. Todo ciudadano tiene derecho a transitar seguro por su ciudad, a cualquier hora”.
Este nuevo episodio deja al descubierto, una vez más, la forma impune en la que operan las bandas de falsos mototaxistas en la capital loretana. No es la primera vez que se reporta este tipo de delitos en el centro de la ciudad, y, sin embargo, la respuesta institucional sigue siendo deficiente o inexistente.
La ciudadanía clama por acciones inmediatas y sostenidas. No basta con operativos esporádicos ni promesas vacías. Lo que Iquitos necesita es una estrategia integral de seguridad, con presencia real, patrullaje efectivo, cámaras interconectadas y voluntad política.
La carta pública de Noelia Imán no solo representa la voz de una víctima, sino el grito colectivo de una ciudad cansada de la inseguridad, de la negligencia y del silencio de quienes deberían velar por su bienestar. Mientras tanto, la pregunta sigue flotando en el aire: ¿Qué más debe ocurrir para que las autoridades actúen?
(C. Ampuero)