“Muchas comunidades están abandonadas por las autoridades”

*Expresó padre de la parroquia de Bellavista Nanay.

El último fin de semana hubo una actividad religiosa muy importante para la comunidad de Padre Cocha, ubicada a 25 minutos (en peque-peque) desde Iquitos. El padre responsable de la parroquia Bellavista Nanay, a quien también le compete Padre Cocha, se desplazó hasta el lugar para dar la primera comunión a muchos niños y adolescentes, así como el sacramento del Bautismo.

Al concluir la actividad religiosa que contó con los padres de familia, padrinos y madrinas de los bautizados, así como los que hicieron la primera comunión; se pudo dialogar un poco sobre la pobreza en las comunidades de Loreto con el padre mencionado.

“Sí, sí, existe mucha pobreza. Pero no sé si pobreza es una buena palabra que exprese su situación en varios sentidos. En el sentido más allá que tener una casa, o cómo es la casa de la gente que vive en el centro en comparación con lo que es una casa para ellos (de las comunidades) que puede ser un techo, un piso y un plástico para protegerse de las lluvias ya que no hay paredes.

Muchas comunidades están abandonadas por las autoridades, hay colegios, pero no hay clases porque a veces pasan semanas o meses sin que lleguen los maestros. No cumplen bien su trabajo, acá nomás he visto en la comunidad de “Santa Rosa” por el río Momón, pasaba el tiempo y los niños no recibían sus clases.

Igual en salud hay postas, pero no están equipadas, no hay personal, muchos tienen que caminar desde otras comunidades o ir hasta Bellavista, pero no hay peque-peque, entonces se presentan los problemas; todo esto va más allá de hablar en el sentido material que tener o no tener casas, el pueblo está abandonado”, habló el padre.

De otro lado, dio a conocer que son 66 comunidades las que están integradas a la parroquia de Bellavista Nanay. “Es humanamente imposible que yo pueda llegar siempre a las 66 comunidades, algunas parroquias las visito una vez al año y otras una vez al mes. Lo bueno es que contamos con los llamados ANIMADORES, que son preparados desde hace años para que ellos hagan celebraciones religiosas los días domingos.

Su trabajo es muy importante, hace 8 años contábamos solo con 25 animadores, ahora son 50, es decir el doble y eso es muy gratificante. Ellos son capacitados tres veces al año. Yo solo no puedo estar en todos lados, físicamente es imposible para mí”, mencionó el padre.