- Mala práctica que ya se creía desterrada, debe ser investigada por Inspectoría del Ejército.



Primordialmente por el actual Comandante General de la V División de Ejército en Loreto, General de División Miguel Ángel Álvarez Villalobos, puesto que por la zona del Putumayo no se estarían respetando las reglas básicas de los derechos de las personas contemplados en la Corte Interamericana de Derechos Humanos.
Los jóvenes maltratados no eran delincuentes atrapados por la policía, sino soldados del ejército peruano que hacían su servicio en la frontera del Perú, allá por esa frontera abandonada totalmente por el Estado. El vergonzoso y aberrante acto ocurrió en la localidad de Tres Fronteras distrito de Teniente Manuel Clavero, río Putumayo.
Fue aproximadamente a las 3:32 am del día 21 de abril, personal del ejército se desplegó por todo lugar de la comunidad en busca de 9 jóvenes que sirven a su patria en el Batallón N° 83 de GUEPPI, mencionando que habían salido y no regresaban a su cuartel.
Un morador de la comunidad se percató justamente en el momento que los hombres del ejército golpearon salvajemente, inhumanamente a los jóvenes soldados, por lo que se acercó a pedirles que no traten de esa forma a esos chicos. Como respuesta, según se aprecia en el video, los del Ejército referían: “averigüen bien, si no saben, no se metan”.
“De los 9 soldados que salieron de esa base hasta el momento no saben qué sucedió con dos de ellos; lo que aducen es que se desertaron. ¿Por qué estos jóvenes salieron del cuartel y no quisieron regresar? Saquen ustedes sus propias conclusiones. Ya no es extraño esos sucesos dentro de estos cuarteles, el trato inhumano muchas veces que reciben hacen que salgan los soldados y no quieran regresar.
Fue grande la sorpresa de los pobladores al ver el accionar de los efectivos que intervienen a estos jóvenes que salieron sin el ánimo de regresar. Muchos de estos jóvenes ingresan a prestar el servicio militar de manera voluntaria, donde lo trasladan a diferentes lugares muchas veces sin poder comunicarse con sus familiares.
El caso que pasó con un soldado que falleció por golpes inhumanos que le propinaron en uno de los puestos del río Napo es sólo una muestra clara de lo que pasa dentro de estos cuarteles. Hay una persona de rango superior que se cree el intocable por tener un grado más alto y aprovecha de eso para sancionar según ellos a los reclutas.
Hay muchas cosas que se sabe por testimonio de los mismos soldados. Hay la información que el cacique de la comunidad junto al Teniente Gobernador y otras autoridades civiles preocupados por lo que sucedió, citarán a un diálogo al Comandante Juan Mera Vega para tratar estas acciones que realizaron agrediendo física y verbalmente a estos jóvenes a vista de los civiles.
Las imágenes que ponemos son imágenes reales que nos proporcionaron pobladores que presenciaron el acto, muchos tratarán de no decir nada o no involucrarse en situaciones como esto por temor a recibir amenazas o simplemente por callar y no tener problemas.
Desde este espacio invocamos a las autoridades de la comunidad de Tres Fronteras, no solo tengan un diálogo con el responsable de este destacamento; sino den cuenta también a la Defensoría del Pueblo porque se trata de personas con derecho a ser tratados dignamente por más que se encuentren dentro de un cuerpo militar y que se investigue a fondo este suceso”, mencionaron desde Tres Fronteras.
La información que se maneja hasta hoy es que estos soldados tratan de escapar de la base por los múltiples maltratos inhumanos que reciben, la propina o asignación económica que reciben son captados por los altos mandos. Dentro del mismo Ejército se formó un negocio donde los soldados son obligados a comprar poniendo a los artículos el doble de precio de sus costos, los uniformes que los venden cuestan el doble de su precio y son obligados a comprarlo. narran desde la zona, lo que debe ser investigado a profundidad.
(LMHL).