- Paola Bances durante una conferencia de prensa
En un ambiente cargado de emociones, la abogada Paola Bances, compartió su dolorosa experiencia de violencia doméstica en una conferencia de prensa que dejó a todos conmocionados. Con la voz entrecortada, relató cómo el hombre que una vez juró amarla, su esposo Jorge Cabrera Salvatierra, intentó quitarle la vida. Este impactante testimonio, ofrecido en las instalaciones del Colegio de Abogados de Iquitos, sacudió a los asistentes, quienes escuchaban con atención el desgarrador relato de una sobreviviente de intento de feminicidio.
“Nunca pensé que algo así me pasaría a mí”, confesó Paola, con la mirada llena de tristeza y aún en estado de shock. Como abogada que ha dedicado su carrera a la defensa de los derechos de las mujeres, su testimonio resonó profundamente. “Es irreal. Pensé que estas historias solo les pasaban a otras personas, jamás imaginé que estaría contando la mía desde este lugar. Mi esposo nunca había sido violento conmigo, al menos no físicamente. Tenía un carácter fuerte, como yo, pero jamás pensé que sería capaz de intentar matarme. Vivir esta tragedia es algo que aún no logro asimilar”, continuó, en un intento por poner en palabras el trauma que aún la acompaña.
A lo largo de su intervención, Paola dejó entrever las complejidades emocionales de ser víctima de alguien que, hasta ese momento, formaba parte de su vida. “Es como si estuviera viviendo una película, pero soy la protagonista de una historia que nunca quise escribir. Al principio no lloré, estaba en shock. Me costó darme cuenta de lo que realmente había sucedido”, confesó entre lágrimas.
La conferencia estuvo respaldada por la presencia de la Dra. Rita Ruth Riera, vicepresidenta del Colegio de Abogados de Loreto y defensora legal de Paola, quien hizo un llamado a la sociedad para que no permanezca indiferente ante las situaciones de violencia de género. “Lo que le pasó a Paola podría sucederle a cualquier mujer. Es vital que rompamos el silencio y que las instituciones brinden el apoyo necesario. Maltratar a una mujer afecta a todos, como sociedad no podemos ser cómplices del silencio”, expresó con firmeza.
Paola, visiblemente afectada, resaltó también el papel fundamental que ha jugado su familia en su proceso de recuperación. “No sé si hubiera podido resistir esto sin el apoyo incondicional de mi familia. Mi hermana y mis padres han sido mi roca en medio de esta tormenta”, señaló con gratitud.
Antes de finalizar, Paola hizo un emotivo llamado a todas las mujeres que puedan estar viviendo situaciones de violencia, instándolas a no callar: “No debemos permanecer en silencio. Nosotras debemos apoyarnos, y los hombres también tienen que ser parte de este cambio. Las señales de alerta están ahí, solo debemos ser conscientes de ellas para evitar que una tragedia se vuelva irreversible”.
El testimonio de Paola Bances no solo es una advertencia de la vulnerabilidad que viven muchas mujeres, sino también un llamado urgente a la acción. Su valentía al compartir su experiencia invita a reflexionar sobre la importancia de denunciar, de buscar ayuda y de no minimizar las señales de alerta.
(C. Ampuero)
