-Entrevista a Alfonso López Tejada, Presidente de ACODECOSPAT
Los lotes petroleros del Marañón. Según anuncios de la empresa estatal Perupetro, en la cuenca del río Marañón se ubican 3 nuevos lotes destinados para la extracción de hidrocarburos. Estos lotes se licitarán en los próximos meses; sin embargo, se ubican en una zona altamente sensible en términos ambientales y culturales: Por un lado, se encuentran en el área de amortiguamiento de la famosa Reserva Nacional Pacaya-Samiria, por otro, los lotes se superponen a territorio ancestral y comunidades cocama.
El gobierno anunció también que realizará un proceso de consulta previa a las comunidades indígenas que se encuentren en los ámbitos de los lotes. Pero, 40 años de actividad petrolera en la zona (el Lote 8x está en actividad desde 1971, se ubica en el interior de la Reserva Nacional Pacaya Samiria) sin respeto a los derechos colectivos indígenas, ni fiscalización ambiental estricta y necesaria, anuncian un proceso lleno de debilidades y desconfianzas.
Además, la Ley de Derecho a la Consulta Previa (agosto 2011) y su Reglamento (marzo 2012), han sido observados por diversas organizaciones indígenas y especialistas, incrementando la inestabilidad de un proceso que debe asegurar todas las garantías de buena fe que sean necesarias.
Esta es una lucha por la vida
Estos días se realiza el XI Congreso de la Asociación Cocama de Desarrollo y Conservación San Pablo de Tipischa – ACODECOSPAT, en la comunidad Dos de Mayo, en el corazón de la Reserva Pacaya Samiria. Los nuevos lotes petroleros de la cuenca del Marañón se superponen a varias comunidades integrantes de ACODECOSPAT. Sobre esa coyuntura conversamos con el apu Alfonso López Tejada, presidente de la organización.
¿Qué representa la actividad petrolera en los territorios indígenas y las comunidades?
La actividad petrolera es una acción concreta que altera nuestro territorio, nuestro ambiente, nuestra salud, nuestra cultura. Hoy, hay 3 nuevos lotes en el Marañón, desde San José de Saramuro hasta cerca a Nauta. Además, hay 17 nuevos lotes en el río Corrientes y hay más.
¿No hay respeto a sus derechos?
Así como anteriormente no se consultó para lotizar estos sobrepuestos a nuestros territorios, ahora con estos lotes ellos se vuelven a imponer. Ahora, me ha dicho un petrolero que están construyendo barcos con doble fondo que irán desde el Curaray hasta la Estación 1, en San José de Saramuro, que ya no habrá contaminación. Los ríos dejarán de ser nuestros caminos y serán vías para grandes trasnacionales, violando nuestros derechos. Los ríos son nuestra única fuente de acceso al agua, esta es una lucha por la vida.
En junio de 2010, en el puerto de San José de Saramuro, se registró un derrame de más de 400 barriles de petróleo en el río Marañón. Sin embargo, en el último mes de junio, la Fiscalía Especializada en Materia Medioambiental de Loreto se resolvió el archivamiento del caso alegando que no se puede determinar responsabilidades.
Tiempo atrás, en el año 2000, ocurrió un derrame de petrolero de aproximadamente 5000 barriles. A la fecha, este caso ha prescrito impunemente en los archivos judiciales de Loreto. En ambos casos, 2010 y 2000, la empresa Plus Petrol es la principal responsable de los hechos.
2013: «Es el año más difícil que se viene»
Alfonso López, prosigue: «Desde 1971 hasta aquí no hay registro de los daños ambientales en el interior de la Reserva. Entonces, no hay registros ambientales y no hay voluntad para remediar [la contaminación], por lo tanto no hay la confianza necesaria».
Y el anunciado proceso de consulta ¿Tampoco brinda confianza?
No se puede avanzar en esa consulta porque no conocemos cuántos son los pasivos, quiénes son los responsables. Han pasado ya 40 años sin consulta y hoy, además, nos vuelven a imponer nuevos lotes».
¿Se oponen a los procesos de consulta que anuncia el Estado?
No es que nos opongamos a la consulta, nosotros no nos oponemos a un proceso de consulta responsable, pero este derecho ya ha sido violado por el Estado. Incluso la ley de Consulta es agresiva, al no haber sido consultada previamente con los pueblos indígenas.
¿Qué es indispensable para que el proceso de consulta sea responsable?
Los pueblos tenemos que consentir según el Convenio 169 de la OIT, como elemento fundamental está el consentimiento. Consideramos que el año próximo [el 2013] es el año más difícil que se viene. Nuestros hermanos no están aún preparados, seguramente van a tratar de desarticular las organizaciones.
Alfonso López es sincero al decir que los hermanos aún no están preparados. Es una muestra más del contexto en que se anuncian las próximas consultas previas. Por lo mismo, en la perspectiva de garantizar un proceso exitoso y de buena fe, es necesario que estos procesos sean sumamente respetuosos de la institucionalidad indígena y de los marcos legales que a nivel nacional e internacional les amparan. Asimismo, el Estado debe asumir en estricto sus responsabilidades ambientales, garantizando que la biodiversidad, la salud y finalmente la vida, se encuentran a buen resguardo en la Amazonía peruana. (MIPR)