– Incertidumbre sobre vacantes
Largas colas en la vereda, horas bajo el sol y noches sin dormir. Eso es lo que los padres y madres de familia de la institución educativa Victoria Barcia Bonifatti tienen que pasar para matricular a sus hijos en el plantel y poder ofrecerles una buena educación. Desde hace varias mañanas ellos hacen cola afuera del centro educativo con la esperanza de poder inscribir a sus pequeños en el período que sigue.
«Estamos aquí desde hace 24 horas, no nos podemos ni mover por temor a que alguien nos gane el lugar. Pero estamos viendo que hay gente que al parecer tiene preferencia pues llega sin hacer cola y pasa de frente, cuando nosotros llevamos horas incómodas y bajo el sol. Ni siquiera nos pueden decir si aún hay vacantes o no, de repente estamos aquí y al final no podemos hacer nuestras matrículas», dijo indignada una madre.
«A nosotros nos molesta que nos tengan en ascuas, que no sean claros con nosotros. No es justo que perdamos horas de trabajo, las mismas que son necesarias para poder aportar al colegio, y que no nos digan si vamos a poder matricular a nuestros hijos. Deberían dejarnos saber sino para buscar otra alternativa de colegio», añadió un ofuscado padre.
La falta de comunicación del personal del centro educativo con los padres avivaba los ánimos en las afueras del plantel: «Las indicaciones de la directora son claras y los padres entran de diez en diez», dijo el portero.
Sin embargo muchos padres aseguraban que había algo poco claro en la situación ya que algunos incluso ya tienen niños inscritos ahí: «Yo tengo un hijo que ya estudia acá, entonces ¿por qué no tengo preferencia? Cuando hay padres que llegan por primera vez y ya han realizado sus matrículas. Me parece que acá la plata es la que mueve todo», aseguró una consternada madre. (C. Chunga)