Identidad

En el mundo se vienen generando muchos cambios, más rápido que desde hace miles de años cuando el hombre y mujer empezaron a evolucionar. Pero, esto que más lo asociamos a desarrollo o ser cada vez más modernos, ha sido totalmente distorsionado.
Y esto ha venido sucediendo desde cientos y cientos de años, con los cambios o inventos y creaciones, que surgen para brindarnos una mejor calidad de vida, pero los humanos nos hemos ido a extremos, desnaturalizándonos.
Lo natural fue empezado a ver como algo fuera de lugar, que había perdido su valor, y era y es cada vez más reemplazado por lo artificial, por lo creado por el hombre si bien en muchos casos para mejorar la vida, en otros para destruirnos sutilmente.
Una realidad que no queremos entender, a pesar que lo estamos viviendo con tantas situaciones adversas en diferentes aspectos físicos y materiales, aunque también está incluida nuestra esencia como seres originarios de alguna cultura.
Y en esto queremos reparar, porque es parte del racismo que impera todavía en muchos lugares del mundo, como en nuestra Amazonía, y a propósito del 194 aniversario de la ciudad de Nauta, da mucho gusto ver cómo se une la ciudadanía para participar de sus actividades.
Un mundo kukama kukamiria más revalorado por los mismos descendientes, por los mestizos, y por quienes se consideran distantes de esta cultura, a pesar de pertenecer por sangre o por convivencia en el lugar.
Mucho antes no existían estos complejos a los que la mal entendida modernidad nos ha arrastrado, a negar nuestra propia y amada identidad, por lo “sofisticado”, desechando nuestro ser natural y todos sus valores. Por ello resulta interesante ese aire de unión nautina y que se espera trascienda más allá de su aniversario.