“Fuerza mi amor, vamos a salir de esto, tu familia espera tu regreso a casa”

  • Le dijo su esposa al médico Segundo Pinillos Reyes, mientras lo trasladaban a Lima.

Triste, muy triste, pero el doctor Segundo Pinillos, ex director regional de salud, retornó a Iquitos, pero en una urna donde guardan sus cenizas. Dejando a una esposa dolorida por su partida, al igual que sus hijos amados.
Ayer Jésica Castillo Cortez, pudo narrarnos un poco los hechos de cómo habían sido los últimos días del reconocido médico quien cuando fue director regional de salud, lo primero que hizo fue fortalecer el primer nivel de salud, las postas, los centros de salud en comunidades. Es decir, se adelantó a lo que ahora recién está impulsando el Ministerio de Salud.
Acá en vez de premiar al doctor Segundo Pinillos, lo sacaron del puesto y encima, trataron de disminuir su importante iniciativa. Botaron a casi mil profesionales que habían sido contratados para la tarea de trabajar directamente con el pueblo. Dejaron totalmente desmantelado y desprotegido el sector vulnerable en la Amazonía.
“Cuando aún podía enviar mensajes, él pidió a sus hijos que me cuiden y que se cuiden ellos igual. Mis hijos son lo más hermoso que me ha dejado Segundo. Es algo muy doloroso todo lo que ha pasado, nos hace tanta falta como cabeza de familia”, empieza hablando Jésica, quien en agosto cumpliría 28 años de casada a su lado.
¿Cómo así es que llega a un estado grave el doctor Pinillos?
-Un día empezó a sentirse mal, él no tenía síntomas covid. Se le hizo análisis y salió con resultados de dengue. Estaba siendo tratado por dengue en el consultorio que estaba cerrado, no se atendía. Tenía las plaquetas bajas, un día cuando regreso de trabajar lo encontré un poco agitado.
Llamé a mi hermana para que ubique a la doctora Yafret, pero no pudo. Se habló con el doctor Calampa y él dijo que lo llevaran al hospital regional. En el camino nos cruzamos con el Dr. Luis Culqui, él mismo llevó a Segundo al consultorio para la tomografía, al tópico y el primer tratamiento.
Después de eso, no tenía nada. No estaba agitado. Amanecimos ahí con mi hijo. Se levantó bien, luego nos comunicaron que el 50% de su pulmón estaba comprometido y que iba a ser internado.
Pasó el doctor Casapía, también la doctora Mercy Panduro, recuerdo que ella le preguntó cómo se sentía de la noche anterior a ese día. Él le dijo que estaba bien. Ella le sugirió que podría ir a su casa a seguir el tratamiento. Luego el doctor Casapía, expresó que había comprometido la mitad del pulmón y que sería mejor que se interne.
Nos despedimos en la puerta del ascensor del hospital, no lo volví a ver hasta después de dos semanas, el día que lo evacuaron. Pero no parecía él, se bajó muchísimo de peso, mucho. Antes del traslado, cuando hablábamos por teléfono él se agitaba mucho, por lo que se cambió por mensajes.
Recurrimos al doctor Miguel Palacios (Colegio Médico de Lima) promoción de Segundo; él me dijo que había un vuelo y que coordine con el doctor Runciman para la pronta evacuación a Lima. Yo lo busqué y tengo una especie de resentimiento porque le pedí que envíe a mi esposo y me respondió que había otros médicos más graves que él. Prefirió enviar a un médico más joven, sin oxígeno, no a mi esposo que estaba mal.
Lo enviaron el 5 de mayo y el 12 de mayo, pocos minutos antes del 13, Segundo falleció. Tengo su último mensaje antes que entrara a ventilación mecánica. Decía que la doctora del hospital Rebagliati, se había entre sonreído y sería por el tratamiento que le habían dado en Iquitos. “Dice que me han dado un tratamiento para una persona asintomática, y no debió ser así porque tenía el 50% del pulmón comprometido”, contó Jésica.
“La última imagen que tengo en mi memoria de mi esposo vivo, es cuando lo sacaron para ser evacuado, me levantó la mano en señal de victoria. Yo le respondí, le dije… fuerza amor, vamos a salir de esto…tu familia espera tu regreso a casa”, habla la señora y sus lágrimas incontenibles enrojecen sus ojos, mojan su mascarilla, tanto que tiene que bajarla, coger un pañuelo y secarlas.
Descanse en paz doctor Segundo Mercedes Pinillos Reyes.