- Personal de salud se encuentra a cargo de la evaluación de su salud.
La señora Amanda Silvana Arimuya (28), única sobreviviente del asesinato en contra de su familia, hecho ocurrido en el distrito de San Pablo de la provincia loretana de Mariscal Ramón Castilla, fue evacuada al Hospital Regional de Loreto debido a sus graves lesiones.
Fueron los médicos del centro de salud de Caballococha, quienes solicitaron la referencia hasta el Hospital Regional debido a cortes en el cuerpo provocadas por armas blancas durante el ataque que realizaron un grupo de personas a su familia.
Alrededor de las 3 de la tarde, de ayer lunes 15 de enero, la mujer fue ingresada a sala de tópico para recibir una primera evaluación del personal de salud del departamento de emergencia, quienes posteriormente determinaron su atención y posterior traslado a otra sala.
El ataque se registró el pasado domingo 14 de enero, alrededor de la comunidad de Lindero, cerca de la capital distrital, mientras la familia navegaba una embarcación para acudir a la ciudad a comprar alimentos, actividad que era rutinaria por parte de la familia ribereña.
De acuerdo con la subprefecta de San Pablo, Loyda Lozano Bardales, durante sus declaraciones a la Policía Nacional del Perú, la mujer narró que fue atacada por un grupo de personas a quienes aseguró conocer como moradores de su comunidad.
“Dijo que a uno de sus hijos le cortaron en la garganta, al otro lo balearon, a su esposo también lo balearon, y a ella le hicieron corte, pero no la balearon porque el arma se trabó. Todos fueron arrojados al río, por suerte ella fue la única que sobrevivió”, contó la autoridad distrital.
Mientras la mujer se encuentra delicada de salud en el Hospital Regional, los cuerpos de su esposo Wellington Rodriguez Soplín (27) y sus hijos de 4 y 6 años, fueron velados por sus familiares y miembros de su comunidad, para posteriormente ser enterrados hoy en el cementerio de la población.
Todo lo ocurrido se encuentra en proceso de investigación por parte de la Policía Nacional del Perú y el Ministerio Público, la población de San Pablo exige dar con el paradero de los asesinos y procesarlos de la manera más próxima ante la justicia.
(K. Rodriguez)