“El poder judicial no puede reemplazar al ministerio público en su hipótesis delictiva”

  • Opinó el Dr. Jaime Meléndez Aspajo, respecto al trabajo desarrollado por los operadores judiciales.


Se le consultó en torno a varias de las investigaciones que inicia la fiscalía, siendo qué al finalizar los juicios en el poder judicial, muchas de ellas no llegan a buen puerto.
“Últimamente hemos visto que la población no se encuentra conforme con los resultados de los juicios, toda vez que el poder judicial viene absolviendo casos que fueron emblemáticos cuando se iniciaron. Muchas veces la población espera que el poder judicial, los jueces, tengan un sesgo punitivista cuando ésta es una función que le corresponde al ministerio público en cuanto a la carga de la prueba.
Si el poder judicial no puede relevar el trabajo del ministerio público es porque éste carece de la logística necesaria para realizar investigaciones de delitos complejos. Significa que el ministerio público no tiene armado su equipo técnico multidisciplinario como lo establece el Código Procesal Penal.
Que tenga peritos en ingeniería civil, peritos en química, peritos grafotécnicos, contables. Y ahora que están tan de moda las pericias de las cámaras de seguridad, es decir, pericias antropométricas para poder establecer la identidad de los presuntos autores.
Entonces las envían a Lima y se duda del fiscal y él no tiene la culpa. Las autoridades del ministerio público deben exigir al gobierno central, a la Fiscalía de la Nación que se les dote de los mecanismos necesarios para ejecutar un trabajo efectivo, transparente, lo que ahora no se está dando. Por eso se ve tanta impunidad y absueltos, porque hay investigaciones “tiradas de los cabellos”.
Y sobre todo cuando se trata del patrimonio del Estado donde las investigaciones son complejas y los funcionarios peculadores se rodean de todas las garantías para no ser descubiertos en la sustracción del dinero del Estado.
Tenemos un ministerio público pobre en cuanto a logística ¿y cuáles son las consecuencias? Que terminan sueltos los funcionarios peculadores y esta situación desmoraliza a la población pues estamos en una región tan pobre y tan rica a la vez, donde el presupuesto se desaparece. Un ejemplo, son los Núcleos Ejecutores que han sido saqueados, una vergüenza que les hurten el poco presupuesto que el Estado les da.
A veces esas situaciones quedan impunes por la mala investigación desarrollada, pienso que para ocupar un cargo cuya tarea es la de investigar delitos, se tiene que exigir que nos den los medios para investigar esos casos, caso contrario nos volvemos en cómplices de un ingreso indebido. Porque si yo como fiscal, como cabeza de investigación, no voy a cumplir con mi función, mejor doy un paso al costado porque estaría aprovechándome del dinero del Estado con un sueldo que no me merezco.
A veces también por presión de la prensa la fiscalía se ve obligada a avanzar una investigación incompleta y las consecuencias las vemos ahora cuando el poder judicial no puede reemplazar al ministerio público en su hipótesis delictiva” aclaró Meléndez Aspajo.