En lo que va de este año 2024 se viene observando un impulso al mejoramiento de la infraestructura escolar, que en realidad se encuentra muy deteriorada en las ciudades de la región Loreto, como también en la zona rural.
Son varios colegios que vienen recibiendo mejoras y otras en su total área física, aunque lamentablemente se exceden de los tiempos de construcción establecidos en los expedientes técnicos, y eso sería lo de menos si finalmente va cumplir su objetivo estrictamente pedagógico.
Conocemos que las Unidades de Gestión Educativa de cada provincia de Loreto tiene su área, oficina o gerencia de Infraestructura que tiene el conocimiento pleno de una construcción con criterios para la enseñanza, pero al parecer no se toma en cuenta sus opiniones.
Decimos esto, porque además del impulso del mejoramiento de la infraestructura escolar por parte de las autoridades locales y regionales, se debe exigir que los diseños arquitectónicos de las instituciones educativas sintonicen con la realidad climatológica, que no sean diseños inadecuados.
No podemos entender cómo se permite que los diseños de colegios no vayan de acuerdo al clima tropical. Tenemos como referencia las casas antiguas de Iquitos con puertas y ventanales que se pueden abrir y cerrar para dependiendo de la temporada abrirlas para ingreso de aire fresco o cerrarlas para protegerse de las aguas de la lluvia.
Lo que vemos es que se siguen haciendo diseños como para un clima de zona fría con ventanales de vidrio selladas, que insinúan la colocación de cortinas y el uso de aire acondicionado, cuando la realidad económica tampoco apunta al uso de esos artefactos.
Ha pasado en recientes colegios inaugurados como el Rosa Agustina, donde tampoco se dieron cuenta que la alta temperatura va “cocinar” en sus aulas a los estudiantes, por lo que vienen coordinando con los padres de familia para la adquisición e instalación de ventiladores. Esto debe cambiar, es una falta de respeto a nuestros niños, niñas y adolescentes.
Diseños inadecuados
