- Suplantación de identidad causo pérdidas por 35 mil dólares
En un operativo reciente llevado a cabo en la ciudad de Iquitos, personal de la comisaría 9 de octubre de la Policía Nacional del Perú (PNP) logró la captura de María Ofelia Panduro Manahuaco, de 23 años, acusada de estar involucrada en un fraude informático que resultó en la pérdida de 32,500 dólares. La intervención se realizó el pasado 16 de agosto de 2024, en la calle Lagunas, cuadra 4, en el asentamiento humano Virgen de Lourdes, distrito de San Juan Bautista.
Según fuentes policiales, el fraude se perpetró a través de una suplantación de identidad que afectó a la empresa Grupo VMV2030 EIRL, con sede en San Isidro, Lima. El delito fue denunciado por Miriam Hidalgo Romero, una ingeniera civil de 36 años, empleada de la mencionada empresa. Según el reporte presentado ante la División de Investigación de Delitos de Alta Tecnología, el 15 de agosto a las 3 de la tarde, Hidalgo recibió una llamada telefónica supuestamente de un asesor bancario, quien le solicitó actualizar información de las cuentas de la empresa.
Durante la llamada, el impostor, identificado como Raúl Enrique Palacios, engañó a la víctima para que proporcionara acceso a las cuentas bancarias de la empresa. Minutos después, la empresa fue notificada por el banco Scotiabank sobre una serie de transferencias electrónicas no autorizadas, que en total sumaron 32,500 dólares. De este monto, 1,865 dólares fueron transferidos directamente a la cuenta de Panduro Manahuaco.
La captura de la acusada se realizó tras una investigación coordinada por la Dirección de Investigación Criminal (DIRINCRI-Lima). La intervención se llevó a cabo en la tarde del 16 de agosto, en una operación en la que los agentes se desplazaron a la vivienda de Panduro Manahuaco en San Juan Bautista, donde fue detenida sin resistencia.
Este caso señala la creciente amenaza del fraude informático en la región, y la necesidad de que las empresas y ciudadanos refuercen sus medidas de seguridad cibernética. Panduro Manahuaco enfrenta cargos por los delitos de fraude informático y suplantación de identidad, ambos tipificados en el Código Penal peruano con penas que podrían alcanzar hasta los 8 años de prisión.
Entre tanto la PNP ha instado a la ciudadanía a desconfiar de cualquier llamada o comunicación que solicite información personal o financiera, y a verificar la autenticidad de las mismas a través de canales oficiales. Además, recomiendan el uso de sistemas de verificación en dos pasos y la actualización constante de contraseñas para evitar ser víctimas de este tipo de delitos.
Este caso continúa en investigación, y se espera que se realicen más detenciones en relación con la red que facilitó este fraude. (C. Ampuero)