Contenedores de basura

Los contenedores de basura ubicados en diferentes partes de la ciudad, más que una solución al amontonamiento de los desperdicios en las esquinas de las calles o en las vías peatonales de los mercados, son elementos de donde emanan otras fuentes de contaminación, motivados por las personas que se ganan la vida juntando cosas que pueden ir al proceso de reciclaje cuyo objetivo es convertir desechos en nuevos productos.
Los recicladores escarban entre los desperdicios, una mezcla de desechos sólidos, orgánicos e inorgánicos, y van sacando la basura al exterior en busca de los plásticos, especialmente botellas de gaseosas, regando de inmundicia el lugar, lo que luego se esparce por las calles, llevada por perros y gallinazos.
Antes de la instalación de los contenedores, la gente dedicada a esta ocupación hacía su trabajo en el botadero, pero al tener prácticamente en sus manos lo que buscan, ahora lo hacen en la ciudad.
Esto ha motivado que el vecindario eleve su voz de protesta porque ve expuesta su salud, ya que la basura atrae además de perros, gatos y gallinazos, roedores e insectos, transportadores de una y mil enfermedades.
La observación hecha aquí, es para que las autoridades  municipales vean la forma de solucionar el problema, de la mejor manera.
Una ciudad limpia y ordenada es atractiva para propios y extraños, que ven en ella el reflejo de lo que es su gente.
Hagamos de Iquitos una metrópoli donde la higiene sea primera norma de vida para que la contaminación no se entronice como principal preocupación.