– Dentro de poco se verá si Fiscalía archiva o abre investigación preparatoria
– Situación se da en el marco de la XX Conferencia Mundial sobre el cambio climático.
Por: Luz Marina Herrera.
Que se desarrollará en nuestro país en el mes de octubre, donde todos hablarán de lo terrible que se vienen comportando los fenómenos naturales a nivel mundial debido al daño irreversible que se le viene haciendo al medio ambiente. Sin embargo, también está la legislación nacional que muchas veces permite que se den este tipo de atropellos inconmensurables, sobre todo contra la siempre ubérrima Amazonía del Perú.
Las miles de hectáreas deforestadas de árboles primarios en Tamshiyacu, parece ser solo el preámbulo de una película macabra que tendrán que observar las nuevas generaciones de amazónicos. Se pide que se ame y se conserve a la selva, que los niños siembren arbolitos porque estos dan aire, oxigeno, vida; más se piensa empresarialmente en bio-negocios, biocombustibles generados a través de la siembra de plantas dañinas a los suelos selváticos que finalmente los extinguirán, los matarán, los volverán inservibles e insoportables a la vida.
Así de trágico, así de inaceptable. Loreto ha iniciado su camino hacia el fin de su exuberante naturaleza, todo para que grupos de poder puedan seguir acuñando millones de dólares. Cuando no haya agua, cuando no haya selva y alimentos… ¿Se podrán comer los billetes verdes? La respuesta es obvia.
El fiscal del medio ambiente Jhony Ríos Arce, está por pronunciarse respecto a la deforestación de Tamshiyacu que se dio a conocer el año pasado. Su investigación ha concluido y podría archivarla o elevarla a un juzgado para que profundice más y realice la investigación preparatoria. Ayer habló sobre el tema.
«Estamos en la etapa final para ver si se archiva o se procede a la formalización de abrir la investigación preparatoria propiamente dicha ante un juzgado. El Ministerio de Agricultura mediante la dirección general de asuntos ambientales agrarios competente en instrumentos de gestión ambiental, ha emitido los informes. Entre ellos, primero ponía como requisito previo para la ejecución de proyectos agroindustriales, a la empresa Cacao Perú Norte, la autorización de cambio de uso y desbosques.
Luego en un informe aclaratorio excluyen esa autorización de desbosque porque se trata de un tema particular de predios privados otorgados bajo el D.L. 838. Es un tema netamente técnico. Ayer llegó una comisión de la dirección general de asuntos ambientales agrarios y se fue a Tamshiyacu para in sito verificar cuáles son los impactos correspondientes en el área de actividad de la empresa. Seguro sacarán un nuevo informe para hacernos llegar a la investigación y tener en cuenta los parámetros correspondientes», declaró Ríos Arce.
¿Acá se dijo que ellos de todas maneras debieron contar con la autorización de desbosque?
-Hay instrumentos y declaraciones de funcionarios del programa y de la dirección regional que indican que por la particularidad del D.L. 838 no deberían tener autorización de desbosque. Pero todo eso se está analizando de una manera muy profunda para verificar cuál será el accionar del Ministerio Público en cuanto a la controversia jurídica que existe.