Compartiendo información de investigaciones

Hace unos años atrás, era común escuchar cuestionamientos a la labor que cumplía el Instituto de Investigaciones de la Amazonía Peruana/IIAP,  y es que razones existían; y era la poca difusión y socialización de los proyectos y programas de investigación que realizaban. Rara vez se difundían masivamente los resultados del paciente trabajo que realizan, por ejemplo en la reproducción de los alevinos de peces que actualmente es un gran aporte al desarrollo de la acuicultura.
Es digno reconocer que desde el año pasado haya cambiado esta política, y que la valiosa información que poseen, quede prácticamente en una especie de élite de conocimientos. Transmitirlo al público llena un vacío y quizás sin proponérselo han dado una respuesta contundente a los cuestionamientos sobre «¿qué pues hace el IIAP?».
Cada vez que se daban cruciales debates sobre la distribución del canon petrolero, no faltaban voces que por desconocimiento, criticaban su existencia diciendo ¿cuál es el aporte de tanta inversión en investigaciones que no se conoce? Hoy por hoy sabemos que años de estudio han dado y seguirán dando pautas técnicas para el desarrollo sostenible en nuestra Amazonía, porque no solo es Loreto, sino las demás regiones selváticas, las que se ven beneficiadas con el desarrollo de ciencia y tecnología, y que en la actualidad todo ese aporte es muy difundido por un equipo preocupado y que trabaja.
Vemos que la información de las investigaciones ha salido de las reuniones de gabinete, de los eventos dirigidos a los especialistas, de los foros y seminarios, para dar un salto y llegar a los ciudadanos en general, al vecino, a la vecina, a esa población de la ciudad, de los poblados grandes, de los caseríos, a la que también se debe la institución, porque en nombre de su desarrollo también se destinan esos recursos del canon.
Si bien una parte del pueblo que participa y se beneficia directamente de los proyectos que desarrolla en el bosque el IIAP, tienen conocimiento del trabajo que realizan, un mucho mayor porcentaje de la población desconocía de estos trabajos. Es necesaria la apertura para compartir la información, porque es útil también en la vida cotidiana.
Se sabe que la información técnica sí ha llegado y sigue llegando a los diferentes niveles de gobierno, pero son las autoridades las que deben darle el peso que merecen partiendo desde la propuesta de producir digamos caseramente por la seguridad alimentaria, para asegurar algunos productos para nuestra mesa familiar.
Así nos ha quedado claro que el IIAP brinda la tecnología producto de sus investigaciones y son las instancias de gobierno que deben cogerlos para los ansiados proyectos de desarrollo. Parece que algunos están en esa línea y han firmado convenios con el IIAP para la transferencia de tecnología. Esperaremos los resultados. Y que se siga socializando y difundiendo la información para que nadie justifique su inercia diciendo que no se enteró.