Terminó la angustia. Luego de casi dieciocho horas de intensa búsqueda, pudo ser recuperado el cuerpo sin vida el pequeño Wilger Arico Bustamante de dos años de edad, quien lamentablemente desapareció en las aguas del río Itaya la noche del último domingo.
La desaparición del pequeño, movilizó a varias brigadas de bomberos como de defensa civil, quienes ante la falta de equipo poco pudieron hacer para recuperar el cuerpo del pequeño que, según declaraciones de su madre, cayó cuando se encontraba jugando con uno de sus hermanos al interior de su balsa.
«Mis hijos estaban jugando, yo les estaba cuidando porque no quería que ninguno de ellos se caiga al agua porque vivimos en una balsa, pero cuando me levanté para ir a ver la cocina, escuché que cae algo, y al voltear vi que mi hijo no estaba; en ese momento empecé a gritar pidiendo ayuda, pero ya no pudimos encontrarlo», contó la angustiada madre.
Wilger era el último de cinco hermanos, fueron los integrantes de la Marina de Guerra quienes con equipos especializados para buceo, lograron recuperar el cuerpo del niño que fue encontrado en medio de unas ramas a pocos metros de la balsa de donde cayó.
Los restos del pequeño están siendo velados en su humilde casa, que se ubica en la zona baja de la plaza Clavero, a un costado de la calle Requena. (G.Ross)