Autoridades y población de Colonia Angamos piden cambio inmediato de dotación policial de esa localidad

– Irresponsable actitud de efectivo de la PNP que agredió a ex alcalde de Yaquerana violando su domicilio, casi ocasiona tragedia

Las autoridades y población en general de Colonia Angamos, localidad que se ubica a orillas del Río Yavarí, línea de frontera con la hermana República del Brasil, se han unido para exigir el cambio inmediato de todo el destacamento policial de esa capital distrital, ante la irresponsable y repudiable actitud del suboficial PNP Jorge Noriega Cáceres, quien en estado de ebriedad agredió salvajemente al ex alcalde local, Ángel Reátegui Gallardo y su esposa, a quienes en su propio domicilio este mal policía les arrojó al suelo para luego patearles sin ningún tipo de consideraciones, hecho que, incluso, motivó la reacción de un grupo de nativos de la etnia matsés que se encontraba por ahí, que al percatarse de su imperdonable comportamiento le increparon recibiendo a cambio insultos de grueso calibre como los de indios ignorantes por parte del policía de marras, que tuvo que refugiarse luego cobardemente en el puesto policial para escapar de la furia de nuestros hermanos indígenas.

El Gerente de esa Subregión, Javier García Ríos, indicó que está viajando a Iquitos para informar al Presidente de la Región, Iván Vásquez Valera, sobre el lamentable suceso, que pudo generar consecuencias más graves por la provocación de los efectivos policiales a la población, por lo que su permanencia en el lugar podría acarrear un conflicto social peligroso. Según se sabe, este mal elemento estaba libando licor en la vía pública con sus demás compañeros, cuando la señora del ex alcalde fue a comunicarle que tenía una llamada de su esposa desde Iquitos, lo que al parecer desquició al sujeto, ya que se hacía pasar de soltero. Es así que fue hasta la casa de los esposos donde se suscitó la agresión antes detallada.

 

Lo peor es que este energúmeno, al ver que su condenable actitud despertó la ira de los testigos matsés, corrió a su comisaría para salir armado respaldado por sus compañeros de armas y de juerga y enfrentar a los lugareños. De no ser por la oportuna intervención del Mayor EP César Vásquez Rettis, Jefe de la Unidad Militar de Asentamiento Rural/UMAR 2, quién ordenó a los malos policías que volvieran a su puesto policial, hoy quizá estaríamos lamentando una terrible desgracia. El citado jefe militar dijo que iba a informar de este execrable hecho a los altos mandos de la Policía Nacional del Perú, a través de su Comando, a fin de evitar posteriores conflictos. (GRL)