Se podría decir que se ha producido “un llamado a la conciencia”, recordando la frase cliché del predicador conocido mundialmente como el hermano Pablo, que dicho sea de paso hace unos años estuvo por Iquitos y nos tomamos una foto para el recuerdo junto a él. Era un hombre que transmitía bondad.
Es ese sentimiento noble y genuino que nos hace tanta, pero tanta falta, al momento de pensar en el beneficio de todos y todas, cuando se ejerce un cargo de nivel de gobierno y que es parte de las funciones pensar en el bienestar de millones de personas, como nuestro caso como país.
Lo que se replica gobierno tras gobierno, de todos los niveles, son ciudadanos que llegan al poder político y ciudadano con un discurso, pero cuando llegan al sitial se olvidan y muchos actúan en concertación para estafar al país, apoderarse de sus recursos y engañar así a toda la población.
Habría muchísimo qué hablar sobre estas acciones delictivas, pero hoy se presenta un tema crucial en cuanto a decidir frente a una coyuntura de legítimo reclamo por la baja de precios en diferentes productos que afectan directamente a la gran mayoría de peruanos y peruanas.
Se trata de que el ministro de Economía y Finanzas, Oscar Graham, ha realizado un llamado al Congreso, dirigíamos casi angustioso, para priorizar la discusión y aprobación del proyecto de ley que exonera del Impuesto General a las Ventas (IGV) a un grupo de alimentos de la canasta básica, a fin de reducir su precio de venta al público. ¿Lo aprobarán?
Dijo el ministro Graham: “Hacemos un llamado al Congreso para iniciar además la discusión y la coordinación para que este proyecto sea aprobado a la brevedad posible”. Se trata de priorizar proyectos de ley que permitan enfrentar las presiones inflacionarias, entre ellas la exoneración del IGV a los alimentos que forman parte de la canasta básica de consumo.
Explicó que el problema de la inflación en los rubros alimentos y combustibles afecta no solo al Perú sino a todos los países del mundo, y que tendrá un carácter temporal. “Por eso que hemos presentado un proyecto de ley, que, además, tiene un componente, que se genera en situaciones en las cuales hay un conflicto bélico que termina afectando el precio de los alimentos y asimismo cuando la inflación supera los estándares establecidos, alrededor de 6% hacia arriba”. El llamado está dado a los congresistas de nuestro país. ¿Lo tomarán en cuenta?