Lo ocurrido con los derrames inicialmente eran puros accidentes de responsabilidad de las empresas y del propio Estado que poco hicieron por limpiar y nada por remediar los espacios contaminados de donde los pobladores se abastecían para conseguir sus alimentos y generarles economía.
Aquellas épocas no se hablaban de vandalismos por parte de quienes planeaban contar los tubos, sea por diversas razones, generalmente en el marco de protestas; aunque después se supo de otras razones como las que se vienen investigando de presuntos “acuerdos entre determinados pobladores y ciertos personajes vinculados a las mismas empresas petroleras que a su vez se vinculaban con empresas de limpieza del crudo derramado”.
Y siempre nos preguntábamos por qué tanta indiferencia contra la vida de muchos pobladores ribereños bosquesinos e indígenas, porque finalmente a eso conducía la inacción, a la muerte lenta de la gente que habita la zona, o en su efecto que abandonen sus lugares porque no podrían vivir así.
Pero, muchos o casi todos se siguieron quedando por ayuda material limitada que recibían de las petroleras, aun sin importar que lo más importante, que son sus propias vidas, se iba perfilando a desaparecer o enfermarse por los efectos de la contaminación al consumir peces afectados y agua también con niveles de contaminación. Los estudios de salud así lo han confirmado, hay denuncias y sentencias favorables al respecto, donde les dan la razón.
Sin embargo, las poblaciones siguen en el lugar, y es más se crearon nuevos pueblos cercanos a las bases petroleras para recibir apoyo, obviamente. No todas son venidas de los ancestros, pero sí la mayoría. Fue cuando alguien nos dijo, que jamás habrá remediación, lo que sí se busca es el abandono de sus pueblos porque no pueden tener agua ni producir en sus tierras, como antes.
Es ahí donde radicaría lo perverso, por lo que decir desde el Estado y sus entes que se crearon con funciones relativas a la remediación, que no tienen dinero para remediar, lo primero, entonces por qué se crearon si no van a cumplir sus funciones. Además, la responsabilidad de remediación tendría que recaer principalmente en quienes causaron el perjuicio que es la empresa equis, pero los contratos llevan finalmente a que el Estado sea el responsable, que tiene tufillo a corrupción.
Aquí encaja una denuncia de parte de las federaciones y de forma unida, exigiendo la remediación de todo lo dañado porque en las decenas de reuniones sólo escuchan que no hay dinero para preservar sus vidas, a pesar de los millones de millones que genera la comercialización petrolera. Todos en Loreto somos los perjudicados con la contaminación petrolera. ¿Qué proponen nuestras autoridades?
Algo perverso
