La situación de la niñez abandonada es de gran preocupación para los ciudadanos que entienden que cada niña y niño iquiteño, loretano o peruano, es también nuestra responsabilidad porque forman parte de nuestra casa comunitaria.
En ese sentido lo que les pase o no les pase, de alguna u otra forma va repercutir en nuestras vidas, en nuestras familias, en nuestra sociedad; por lo que tenemos que asimilar que son parte de nosotros y su situación de vulnerabilidad por el abandono moral y material, debe tener solución.
Una primera alternativa son los Centros de Atención Residencial para menores de edad, lugares que también los conocemos como los Albergues Infantiles. En Iquitos tenemos varios de estos centros donde brindan protección, alimentación y les facilitan realicen sus estudios de inicial, primaria y secundaria.
Lo que pasa con estos lugares de acogida y cuidados es que han sobrepasado su capacidad para recibir más niños, niñas y adolescentes, salvo que se construyan e implementen más ambientes, pero ello también implicará aumento en el presupuesto para la alimentación.
El tema del financiamiento como en muchas entidades de la sociedad, es lo que más se restringe, no alcanza o malgasta, por lo que las autoridades tienen que mirar y hacer un monitoreo a los albergues, constatar sus reales necesidades, buscar soluciones, y no dejar a los menores a su suerte.
Sobre el tema la Ministra de la Mujer y Poblaciones Vulnerables, Claudia Dávila, en lugar de gestionar la ampliación de la capacidad de los albergues infantiles y buscar fondos anunció que su sector se ha propuesto agilizar los procesos de adopción.
Este anuncio lo hizo, tras comentar que los procesos previos para declarar en situación de abandono a un niño o niña, son extremadamente largos, es por ello que su sector se ha propuesto agilizarlos. Se conoce que existe también una forma de que una pareja o persona sola, pueda solicitar proteger a un menor de edad sin necesidad de que signifique adoptar, se trata de una medida temporal, hasta que algún familiar director pueda asumir la crianza. Obviamente, tienen que ser evaluadas por el personal especializado del Estado.