Acusan a agentes policiales del DEPROVE de presunta intervención arbitraria

  • En contra de un joven que se dedica a la reparación de motos

 

Completamente indignados se mostraron los familiares y sobre todo la conviviente de Nick Alberto Ramírez Correa (25), quien sostuvo que los agentes del DEPROVE-PNP realizaron una presunta intervención arbitraria en contra del padre de su menor hijo, quien fue intervenido la semana pasada cuando se encontraba arreglando una moto marca honda, modelo Wave fuera del taller, ubicado en la calle Manco Cápac, cuadra 2 a inmediaciones de las calles Borja con Iquitos, en el distrito de Punchana.
Según contaron los familiares del joven Ramírez, él no tenía, ni tiene nada que ver con casos de receptación de vehículos menores, tal como lo dio a conocer la policía a través de una nota informativa. En el momento que se registraron los hechos, Nick Alberto se encontraba arreglando una moto Wave, color gris afuera del taller, cuando de pronto llegaron los policías y le solicitaron que por favor les deje pasar para que hagan una inspección.
Fue así que él amablemente abrió el taller y dejó pasar a los agentes del DEPROVE, una vez dentro del taller, los policías encuentran una motocicleta marca Yamaha, modelo XTZ de color blanco, que pintaba como hurtada. En el lugar también se encontraban motos que tenían documentos en regla, pero a pesar que mostraron los papeles, a los policías no le habría importado nada y se las llevaron.
Esto sin lugar a dudas, molestó a los amigos y familiares de Ramírez, quienes tuvieron que demostrar la inocencia del joven, que se dedica a reparar motocicletas en este taller, para poder mantener a su familia.
Tras presentar todas las pruebas y documentos de los demás vehículos menores, el joven finalmente fue puesto en libertad la madrugada del último domingo, demostrando de esta manera que no está metido en actos delictivos ni de otra índole.
Por otro lado, se supo que los familiares y el mismo Nick Alberto, estaría tomando acciones legales en contra de las personas que resulten responsables por esta intervención arbitraria que le mancilló su honra y honor, lo cual le hizo pasar un mal rato por varias horas.
(C. Ampuero)