Lucha contra el narcotráfico

Un informe periodístico da cuenta de la pobre presencia policial peruana en la frontera con Brasil y Colombia, lo que ha determinado que en lo que va del año no se haya incautado más que minucias, en comparación a las toneladas de droga exportada al mercado internacional.

 

Según el informe, la presencia de la policía nacional se reduce únicamente a 12 policías y una lancha, con lo que poco o nada se puede combatir el narcotráfico.

 

Reporteros de esta casa editora, en recientes participaciones en operativos conjuntos con los cuerpos policiales de los países fronterizos, han comprobado la mínima participación de los nuestros tanto en personal como en equipamiento, mientras brasileños y colombianos hacen gala de contar con bases antidrogas, helicópteros y lanchas veloces para perseguir a los delincuentes.

 

Es más, en la última presencia peruana en la frontera como es la isla de Santa Rosa, por donde pasa todo el cargamento de la droga, está totalmente abandonada por el Estado, en todo sentido.

 

Secuestros y asesinatos son pan de cada  día. Los autores de las matanzas son conocidos narcotraficantes que prácticamente han tomado por asalto la frontera, eliminando a quienes pretendan frenar sus ilícitas actividades.

 

El Estado Peruano debería tomar decisiones urgentes a fin de poner a la par de los vecinos a nuestra policía nacional para que no pasen penurias en el desempeño de sus funciones. Si nos hemos propuesto a ser actores activos en la lucha contra el narcotráfico, debemos ingresar al teatro de operaciones con todo aquello que nos permita enfrentar con ventaja a los facinerosos del tráfico de drogas.