Denuncian otro presunto maltrato en el Ejército

  • Soldado habría quedado con alteraciones mentales tras sufrir agresión en base del Batallón de Transportes


James Oliver Suárez Cainamari (22), en enero del 2020 ingresó al Ejército Peruano completamente sano. Sirvió su patria de forma voluntaria, pero de un momento a otro fue dejado en abandono en la vía pública y con aparente alteraciones mentales. Así contó su tía, quién le rescató de la calle cuando vio a su sobrino en esa situación.
El 5 de enero le encontraron deambulando por inmediaciones del mercado Belén. perdió la razón, quedó como “loquito”. Estuvo sirviendo en el Batallón de Transporte 115 del Ejército.
La mamá llegó de Requena, tras enterarse el estado de su hijo y viene exigiendo justicia. Fue su tía quién encontró a su sobrino cuando se fue al mercado de Belén. “Cada vez que salía de franco estaba sano. El estaba internado en el hospital Santa Rosa por un problema en la rodilla, se habría fracturado, no sabemos dónde.Casi una semana estaba en mi casa. Le traje a mi hogar. El ejército nunca dio a conocer sobre la desaparición de mi sobrino”, contó el familiar.
Según la tía de James, su sobrino entró sano a servir su patria. Cuando se fue a reclamar porque a su sobrino le dejaron así. No le dieron respuesta alguna en el Ejército. “Yo le dije al teniente que me atendió, que si no me dan respuesta voy a denunciar en los medios de comunicación. El teniente dijo que no haga eso. Así que estoy haciendo esto para que haya justicia por mi sobrino”, precisó la tía.
Los familiares de este joven piden a los altos mandos oficiales del Ejército Peruano que esclarezcan el hecho. También piden a la defensoría del pueblo y al mismo ministerio público que actúen de oficio, porque esta situación no puede quedar impune.
(C. Ampuero)