Por: Fernando Herman Moberg Tobies
http://riendasciegas.wordpress.com
hmoberg@hotmail.com
@FernandoMobergT
Están sentados a orillas del río Momón, no hay nadie más en la playa poco frecuentada, todos los que tienen movilidad propia van a Santa Rita, por eso escogieron este lugar, para sentir la armonía de la naturaleza sin ruidos ni energía de las personas que contaminan todo con su subjetividad artificial.
El río acaricia sus pies descalzos, miran algunos botes que van surcando, familias que necesitan lo básico para su felicidad; Nicolás fija su mirada en su compañero, sonríe, se levanta mientras Mauricio se recuesta en la arena mirando al cielo, los lentes oscuros lo protegen de los rayos del sol, cierra los ojos e intenta entender qué es todo este nuevo laberinto en el que se está introduciendo. Nicolás se arrodilla, se acerca lentamente al oído izquierdo de Mauricio: ¡Sí, me doy cuenta que soy la persona que te motiva a estar feliz, tú haces lo mismo conmigo! Se besan, Mauricio abre los ojos moviendo los labios, correspondiendo el beso a alguien de su mismo sexo, se emociona y eso le preocupa, sus padres, abuelos, hermanos, su imagen social, todo pasa rápidamente por sus pensamientos, dando vueltas como un remolino:
– ¿Qué es todo esto? ¿Qué fue brother? ¡¡¡No entiendo nada!!!
– Jajaja pero bien que me respondiste el beso.
– Jajajaja, pendejo.
– Jajaja ¡Bueno Mauricio las cosas son así, estoy enamorado de ti!
– ¿y tú, flaca?
– ¡Mira Mauricio! el otro día dí un examen en la universidad, saque 20, jajajaja, nunca en mi vida he tenido esa nota, y ¿adivina en quién pensé en ese momento de máxima felicidad para mí? Me dije ¿voy a ver a mi flaca? ¡y no tuve ganas!, dije ¿voy a ver un rato a mis amigos malogrados? Y ¡no quería fregar ese momento con algo negativo!, dije ¿voy a chupar unas chelas con la gente del barrio? Y ¡nada!
– Jajajajaja, yayaya ¿ósea pensaste en mí? Jajajaja.
– ¡Sí, serio webon! ¡no te rías! ¡serio! ese día yo te había preguntado que era la ley de amparo y tú me explicaste mejor que mi viejo que para borracho y ya ni le entiendo.
– Jajajajaja ¡llevé un curso de Constitución el ciclo pasado, por eso sé! ¡no fue la gran cosa!
– Pero bueno, ¡¡¡no me importa!!! yo me saqué esa nota por ¡ti! y quería estar contigo en ese momento ¡así que te llamé!
– ¿Por qué no me lo dijiste ese día?
– Porque estaba pensando todo Mauricio, fue una locura animarme a decirte esto, al principio me ‘paltie’ horrible, no entendía que estaba pasando por mi cabeza, el que van a decir todo el mundo ¡¡¡pero mira!!! cuando tú me hablas o me dices algo ¡yo te hago caso! ¡en serio! ni a mi vieja. Estoy estudiando en la universidad y gracias a que tú me haces sentir que valgo algo, ¡nadie! ni una flaca ha logrado eso, Mauricio, y si estoy haciendo bien las cosas ¡no me interesa lo que digan!
– ¡Nicolás! eso no me tienes que agradecer, ¡es lo que vales! no confundas la motivación que te brindo con otra cosa.
– ¡Pero webon cuando te veo me da ganas de besarte, abrazarte, eso ya es raro, Jajaja!
– ¡Qué divertido! Estoy ‘palteadazo’, Jajajaja, no me atraes físicamente, ¡pero me encanta estar a tu lado! hay algo en tus ojos que me atrae demasiado, algo que no puedo descifrar ni entender, como me alucino medio místico quiero llegar a saber que es, jajajajaja.
– ¿Te gustan mis ojos?
– ¡Si! Jajaja, están divertidos.
– ¿Divertidos?
– Cuando digo que divertido o algún “derivado”, es mi toque personal para decir que me gusta o encanta, Jajajaja, o sea tú estás divertido ¿entiendes? Jajaja, jajajaja.
– Jajajaja, loco.
Mauricio y Nicolás, se abrazan, aún no logran comprender la situación a la que tendrán que enfrentarse, la sociedad condenará cada una de sus actitudes llenas de un amor incomprendido, no les importa y están convencidos, cansados de equivocarse y de sentir que el vacío latente con el que crecieron no desaparece, ya no quieren buscar culpas o reproches de las guías inconscientes que forjaron sus decisiones, solo quieren seguir avanzando acompañados de quien despierta lo mejor de uno.
