- Solicitan apoyo urgente a la Municipalidad Distrital de Belén
La creciente del río Itaya ha inundado el caserío San Francisco, en el distrito de Belén, en la ciudad de Iquitos, dejando un total de 24 casas en una situación crítica. Aunque muchas viviendas están construidas sobre balsas y altillos, el aumento del caudal ha provocado daños significativos, afectando la vida cotidiana de los pobladores.
De las 24 viviendas afectadas, 11 aún permanecen habitadas, mientras que 13 han sido abandonadas debido al ingreso del agua. La falta de espacios secos ha obligado a varias familias a desplazarse a otras zonas en busca de refugio, dificultando aún más su estabilidad y bienestar.
Los dirigentes comunales han solicitado apoyo urgente a la Municipalidad Distrital de Belén para atender a las familias damnificadas. Advierten que entre los afectados hay adultos mayores y niños en edad escolar, quienes requieren asistencia inmediata para evitar mayores perjuicios.
“En estos momentos nuestros altillos fueron sobrepasados por el nivel del río Itaya, esta creciente es mayor a las registradas en los años anteriores y ahora estamos vulnerables a perder nuestras viviendas y nuestras cosas”, refirió uno de los moradores afectados.
Además de la ayuda humanitaria, los pobladores exigen medidas de prevención ante este fenómeno recurrente. Aseguran que, año tras año, la crecida del río Itaya genera emergencias similares sin que existan acciones concretas para mitigar sus efectos.
Ante esta situación, los vecinos de San Francisco piden la implementación de un plan de contingencia efectivo que incluye reubicaciones temporales y dotación de materiales de protección. También exhortan a las autoridades a evaluar soluciones estructurales a largo plazo para reducir la vulnerabilidad del caserío.
Al respecto, la Municipalidad Distrital de Belén anunció que acudiría hasta la zona a través de su oficina de Defensa Civil para conocer la gravedad de la situación e iniciar las acciones de evaluación que permitan elaborar el documento necesario para asistir a los damnificados.
(K. Rodriguez)